Una apuesta muy fiable
Renault es el campeón y, en consecuencia, difícilmente va a efectuar cambios radicales. Continúa con los mismos pilotos y ha estrenado una evolución del coche que tan buenos resultados le dio la pasada campaña. Una de las principales diferencias entre el R25 y el R26 estriba en el cambio de marchas. El coche del año pasado tenía seis marchas, en el de este se le ha instalado un cambio de siete marchas con objeto de aprovechar de forma más adecuada las prestaciones del motor.
Los ingenieros de Renault están trabajando a fondo para conseguir una evolución del sistema de cambio que evite l...
Renault es el campeón y, en consecuencia, difícilmente va a efectuar cambios radicales. Continúa con los mismos pilotos y ha estrenado una evolución del coche que tan buenos resultados le dio la pasada campaña. Una de las principales diferencias entre el R25 y el R26 estriba en el cambio de marchas. El coche del año pasado tenía seis marchas, en el de este se le ha instalado un cambio de siete marchas con objeto de aprovechar de forma más adecuada las prestaciones del motor.
Los ingenieros de Renault están trabajando a fondo para conseguir una evolución del sistema de cambio que evite la pérdida del número de vueltas entre cada cambio de marcha. De esa forma, aprovechará mejor una potencia. Los resultados alcanzados en cuanto a potencia han sido satisfactorios hasta el momento. Los ingenieros esperaban obtener unos 180 caballos y lo están consiguiendo. Los Renault están girando alrededor de las 19.000 vueltas y esperan llegar a las 19.300 vueltas en las clasificaciones para los grandes premios. Todo ello, con la diferencia de que el motor de este año será unos 20 kilos más ligero que el anterior. En consecuencia, se podrá poner más lastre en la parte más baja del chasis. El coche, por lo tanto, tendrá el centro de gravedad más bajo, un factor muy beneficioso. El resto del coche es similar al del año pasado aunque las entradas de aire al radiador son más pequeñas lo cual también ayuda a la aerodinámica. La suspensión delantera es parecida a la anterior pero la trasera experimenta una pequeña modificación.
Los R26 están haciendo muchos kilómetros, tanto en el banco de pruebas como en Jerez y en Barcelona. Renault ha conseguido un sistema de fabricación de motores que le proporciona mucha seguridad. Van por delante de casi todos rivales, especialmente de McLaren que, en este sentido, continúa sufriendo muchos problemas como ya le sucedió la pasada temporada. McLaren ha perdido el concurso de uno de sus cerebros, Adrian Newey, y de dos importantes ingenieros aerodinámicos mientras que Renault mantiene al mismo equipo que le permitió conquistar el último campeonato. Renault continúa trabajando en pequeñas modificaciones en el túnel de viento aunque, por lo visto hasta ahora, sus bólidos son fuertes, rápidos y continúan siendo fiables. El campeonato será muy interesante porque Honda y Ferrari también parecen haber conseguido bólidos competitivos. Ahora, será crucial la puesta a punto y la adecuación de estos coches a los neumáticos. Será otra de las claves de un campeonato que se presume de lo más competitivo e igualado.