Detenidos en Francia dos etarras del 'aparato logístico' dedicados a comprar armamento

Asier Quintana estuvo preso pero fue liberado al agotarse el máximo de prisión provisional

Los etarras Gracia Morcillo Torres, de 38 años, y Asier Quintana Zorrozua, de 37, fueron detenidos a las 11.45 de ayer en el piso que ocupaban en Saintes (Francia), a unos 130 kilómetros al norte de Burdeos. La Guardia Civil, que ha colaborado en la detención con la Policía Nacional francesa, asegura que ambos forman parte del aparato logístico de ETA y se habrían dedicado a la compra de armas en países del Este, sobre todo en Croacia, y en Italia, donde habrían contactado con la mafia napolitana. Ambos tenían documentación falsa e iban desarmados.

Morcillo y Quintana, que vivían...

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Los etarras Gracia Morcillo Torres, de 38 años, y Asier Quintana Zorrozua, de 37, fueron detenidos a las 11.45 de ayer en el piso que ocupaban en Saintes (Francia), a unos 130 kilómetros al norte de Burdeos. La Guardia Civil, que ha colaborado en la detención con la Policía Nacional francesa, asegura que ambos forman parte del aparato logístico de ETA y se habrían dedicado a la compra de armas en países del Este, sobre todo en Croacia, y en Italia, donde habrían contactado con la mafia napolitana. Ambos tenían documentación falsa e iban desarmados.

Morcillo y Quintana, que vivían con sus dos hijos, de seis y dos años (entregados ayer mismo a sus familiares), huyeron de España entre 1995 y 1996. Morcillo, cuando ejercía de médico en Andoain, huyó tras haber alojado en su casa a los autores del asesinato del socialista Fernando Múgica, el 6 de febrero de 1996, después de que éstos se enfrentaran a tiros con la Ertzaintza. Quintana fue detenido en 1991 por la policía como miembro del comando Matalaz. En 1995, tras permanecer cuatro años en la cárcel a la espera de juicio, el plazo máximo de estancia en prisión provisional, fue liberado y huyó. Posteriormente, en 2000, supuestamente se incorporó a comando Burahuste, que actuó en Madrid. Cuando el comando fue desarticulado, fue el único que logró escapar a Francia, donde se incorporó al aparato logístico, según la Unidad Central Especial (UCE-1) de la Guardia Civil.

Por otra parte, Francia entregó ayer a España al supuesto etarra Xabier Zabalo Beitia, de 32 años, acusado de haber colocado coches bomba en Madrid, Málaga y Salou (Tarragona), en 2001; uno fue desactivado y dos de ellos explotaron sin causar víctimas.

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