Prieto releva a Rojo al frente del PSE alavés con el 94% de apoyo

Los socialistas alaveses efectuaron ayer en su quinto congreso el relevo de su secretario general, Javier Rojo, y eligieron para ese cargo a Juan Carlos Prieto, hasta ahora responsable de Política Institucional en el territorio y portavoz en las Juntas Generales. Prieto obtuvo un respaldo del 94% de los delegados, tres puntos por debajo del porcentaje que avaló la gestión de la ejecutiva saliente. Prieto, de 48 años, procede de CC OO y del PTE, del que pasó en 1989 al PSE. Desde entonces es miembro de la ejecutiva alavesa y de su Comité Nacional. Es procurador en las Juntas Generales desde 199...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Los socialistas alaveses efectuaron ayer en su quinto congreso el relevo de su secretario general, Javier Rojo, y eligieron para ese cargo a Juan Carlos Prieto, hasta ahora responsable de Política Institucional en el territorio y portavoz en las Juntas Generales. Prieto obtuvo un respaldo del 94% de los delegados, tres puntos por debajo del porcentaje que avaló la gestión de la ejecutiva saliente. Prieto, de 48 años, procede de CC OO y del PTE, del que pasó en 1989 al PSE. Desde entonces es miembro de la ejecutiva alavesa y de su Comité Nacional. Es procurador en las Juntas Generales desde 1991.

En su primer discurso en ese cargo, Prieto recordó a Fernando Buesa, asesinado por ETA en febrero de 2000, de quien dijo: "Siempre será nuestro secretario general. Nosotros lo elegimos y nunca lo sustituimos". Prieto aseguró que llega al cargo con el deseo de "enderezar el mal rumbo de la política institucional alavesa", ya que sólo el PSE puede lograr que la Diputación y el Ayuntamiento de Vitoria tengan presupuestos.

Adelantó como condición una interlocución directa de los portavoces socialistas con el diputado general, Ramón Rabenera, y el alcalde, Alfonso Alonso, ambos del PP. "Sin intermediarios, ni delegaciones sin capacidad de decisión", señaló. Exigió el cumplimiento de todos los compromisos anteriores.

El secretario general del PSE, Patxi López, que clausuró el congreso, alabó a Rojo, quien recogió tras Buesa "un partido golpeado, dolido y de resistencia" y lo deja "vivo, dinámico y consolidado". López proclamó la vocación del PSE de ser alternativa al nacionalismo y partido de gobierno para prestar atención a la Euskadi "real", la de las necesidades ciudadanas, frente a un Gobierno vasco que "no las atiende", pues está más preocupado por "las esencias milenarias", y a un PP "vocero del enfrentamiento frustrante". La vertebración y la unidad actual del PSE, recalcó, es "la imagen más poderosa" ante una sociedad "que no quiere división ni siquiera en el seno de los partidos políticos".

Rojo pidió para la política vasca y alavesa "acuerdos transversales". Cualquier otra cosa, dijo, "agranda la brecha entre instituciones y ciudadanía". El secretario general saliente estimó que, tras cinco años de labor, deja a su partido convertido en "elemento común" necesario para "cualquier solución.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En