Crítica:CINE

'Macro-spot' publicitario

Conviene aclararlo de entrada: a pesar de las cinco historias de ficción que le sirven de base, del inmenso esfuerzo presupuestario para darla a luz (se han invertido en ella algo así como 1.000 milloncejos de las viejas pesetas) y que por ahí aparecen nada menos que Zidane, Beckham, Ronaldo, Casillas, Raúl y tutti quanti, Real, la película no es lo que dice ser. O sea, no es una película: es más que ello, y menos, también. Es un macro-spot publicitario muy propio de esta época de deporte globalizado y búsqueda incesante de nuevos mercados.

Porque ni las cinc...

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Conviene aclararlo de entrada: a pesar de las cinco historias de ficción que le sirven de base, del inmenso esfuerzo presupuestario para darla a luz (se han invertido en ella algo así como 1.000 milloncejos de las viejas pesetas) y que por ahí aparecen nada menos que Zidane, Beckham, Ronaldo, Casillas, Raúl y tutti quanti, Real, la película no es lo que dice ser. O sea, no es una película: es más que ello, y menos, también. Es un macro-spot publicitario muy propio de esta época de deporte globalizado y búsqueda incesante de nuevos mercados.

Porque ni las cinco historias, ambientadas en lugares tan remotos entre sí como Senegal, Venezuela, Tokio, Nueva York y Madrid, aguantan por sí solas el interés por lo que dicen contar -son poco más que una colección de tópicos, en el mejor de los casos, bien intencionados- ni la unión entre ficción y reportaje televisivo (con intervención de los jugadores, pero también de viejas glorias y del presidente Florentino Pérez) sirve para homologarla como un producto cinematográfico al uso.

REAL, LA PELÍCULA

Dirección: Borja Manso. Intérpretes: Javier Albalá, Carlos Coppo, Jessica Bell, Mousa Faye, Guillermo Herrera, Keichirou Sasaki y la plantilla del Real Madrid, temporada 2004-2005. Género: aventuras deportivas. España, 2005. Duración: 90 minutos.

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Eso sí: los forofos del Madrid, que, lo dice el filme, se encuentran en los cuatro rincones del globo, disfrutarán de lo lindo con las evoluciones de sus héroes... aunque sólo sea para llegar a un clímax que no sirvió de nada, el de la victoria del Madrid ante el Barça la pasada temporada. Y hay que sacarse el sombrero ante la envergadura de la operación: porque, sin lugar a dudas, servirá para extender aún más la fama del Madrid por esos mundos de Dios. Y sus hinchas, felices, claro.

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