Reportaje:LOS RELEVOS EN LA POLÍTICA

10 candidatos en cinco elecciones

El socialista se medirá por tercera vez en 2008 con Javier Arenas, al que venció en 1994 y 1996

"El poder desgasta, pero la falta de poder,desgasta mucho más". Esta frase del político italiano Giulio Andreotti encaja a la perfección con la situación política que elección tras elección viven los partidos andaluces rivales del PSOE. Un total de 10 candidatos se han medido con Manuel Chaves, en cinco convocatorias autonómicas, y ninguno con éxito.

Cuando Chaves compitió por primera vez como aspirante socialista a la presidencia de la Junta, un plato que aceptó a regañadientes, se presentaban en 1990 Gabino Puche por el Partido Popular; Felipe Alcaraz, por Izquierda Unida; y Pedro Pac...

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"El poder desgasta, pero la falta de poder,desgasta mucho más". Esta frase del político italiano Giulio Andreotti encaja a la perfección con la situación política que elección tras elección viven los partidos andaluces rivales del PSOE. Un total de 10 candidatos se han medido con Manuel Chaves, en cinco convocatorias autonómicas, y ninguno con éxito.

Cuando Chaves compitió por primera vez como aspirante socialista a la presidencia de la Junta, un plato que aceptó a regañadientes, se presentaban en 1990 Gabino Puche por el Partido Popular; Felipe Alcaraz, por Izquierda Unida; y Pedro Pacheco, por el Partido Andalucista. Los socialistas ganaron con mayoría absoluta.

La crisis económica, los casos de corrupción que salpicaban de lleno a cargos socialistas y la crisis entre guerristas y renovadores fueron los elementos que llevaron al PSOE, en 1994, a obtener el peor resultado de su historia electoral en Andalucía. La cuarta legislatura, conocida como la de la pinza, por la unión parlamentaria de PP e IU, dejó al Gobierno de Chaves en minoría en el Parlamento. En esas elecciones se enfrentó a Javier Arenas (PP), Luis Carlos Rejón (IU) y Arturo Moya (PA), quien ni siquiera salió elegido al concurrir por una circunscripción (Granada) en la que la marca andalucista estaba muy devaluada.

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Cuando Chaves toma la arriesgada decisión de disolver la Cámara y convocar de nuevo a las urnas a los andaluces en 1996, a causa del bloqueo por segundo año consecutivo de los presupuestos, la situación pinta mal para el socialista. Las encuestas vaticinan su derrota, pero los andaluces culpan de la situación política no al PSOE, sino a IU y, en menor medida al PP, y contra todo pronóstico Chaves vuelve a vencer a Arenas, Rejón y al Pacheco.

En 2000, vuelve a repetir el andalucista y se estrena Teófila Martínez en el PP y Antonio Romero en IU. Los populares andaluces empujados por la mayoría absoluta que en Madrid logra Aznar, obtienen los mejores resultados en Andalucía, pero insuficientes para desbancar a los socialistas.

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Los datos de 2004 son bien recientes: 10 años después Chaves recupera la mayoría absoluta frente a Martínez, Diego Valderas (IU) y Antonio Ortega. En 2008, parece que volverán Arenas y Valderas y que debutará el andalucista Julián Álvarez.

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