Gallardón baraja aplazar el traslado al Palacio de Correos hasta su hipotético segundo mandato

Las obras de reforma del edificio comenzarán el próximo otoño, con año y medio de retraso

El "sueño" del alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, que aparte de ver terminada la obra de la M-30 consiste en abandonar la Casa de la Villa y trasladar su despacho al más moderno Palacio de Correos en la plaza de Cibeles, corre serio riesgo de no materializarse nunca. Al menos no en este mandato. El traslado se prometió para la primavera de 2004, pero ha sido retrasado varias veces ante la imposibilidad de ocupar el edificio mientras siguieran en él los trabajadores de la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones. Ayer, este departamento del Gobierno central anunció que se va, pero ahora hay que...

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El "sueño" del alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, que aparte de ver terminada la obra de la M-30 consiste en abandonar la Casa de la Villa y trasladar su despacho al más moderno Palacio de Correos en la plaza de Cibeles, corre serio riesgo de no materializarse nunca. Al menos no en este mandato. El traslado se prometió para la primavera de 2004, pero ha sido retrasado varias veces ante la imposibilidad de ocupar el edificio mientras siguieran en él los trabajadores de la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones. Ayer, este departamento del Gobierno central anunció que se va, pero ahora hay que rehabilitar el palacio y el alcalde no está seguro de que le compense trasladar su despacho pocos meses antes de las elecciones municipales de 2007.

Gallardón anunció durante la campaña electoral de 2003 que tenía un "sueño": convertir en sede del Ayuntamiento el "emblemático, representativo y perfecto" Palacio de Correos y Telégrafos, aunque en alguna ocasión, durante esa misma campaña, confesó que nunca lo había visto por dentro. La Casa de la Villa, actual sede del Consistorio, es un edificio "noble" pero antiguo, que "ya no representa al Madrid del siglo XXI", según el alcalde. Por eso su propuesta fue ubicar en Cibeles su propio despacho, el del vicealcalde, Manuel Cobo, varias concejalías y el salón de plenos, además de crear en la zona central del palacio un "espacio abierto a la ciudadanía" con salas de exposiciones y un auditorio.

Una vez ganadas las elecciones y tras firmar con el Ministerio de Hacienda (propietario del palacio) el convenio que cedía el edificio al Ayuntamiento, los responsables municipales fijaron para primavera de 2004 la fecha de la mudanza; pero pronto se dieron cuenta de que las cosas no iban a marchar tan rápidas: había que establecer las condiciones del traspaso -el municipio entregaba a Hacienda cuatro inmuebles y un solar a cambio del palacio- y, sobre todo, buscar acomodo a los trabajadores del antiguo Ministerio de Ciencia y Tecnología, que ocupaban parte del edificio y que prometieron irse en septiembre de 2004.

El Ayuntamiento ofreció a este ministerio un inmueble en el número 41 de la calle del Capitán Haya. Pero, según la versión municipal, el Gobierno central ha ido retrasando la mudanza de estos trabajadores con diversas excusas. "Y hasta que ellos no dejen vacío el palacio, nosotros no podemos iniciar las obras para trasladar allí la alcaldía", se quejan desde el Consistorio. Así, la fecha de inauguración de ese Ayuntamiento del siglo XXI se retrasó primero a diciembre de 2004 y, más tarde, a abril de 2005. Está terminando junio y Ruiz-Gallardón sigue en la Casa de la Villa.

Ayer, por fin, la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones anunció que abandonará Cibeles el próximo lunes y se trasladará a la nueva sede de Capitán Haya, según confirmó a este periódico un portavoz ministerial. Hace unos días, el Gobierno comunicó al equipo del alcalde que el Palacio de Correos estaría libre "antes del 30 de junio".

Rehabilitación

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Pero eso no quiere decir que Gallardón se traslade inmediatamente allí, ni mucho menos. Primero hay que reformar la parte del palacio en la que se instalarán él y sus concejales (una obra que costará cinco millones de euros y que está aún sin adjudicar). "Los trabajos podrían comenzar en septiembre u octubre, y a partir de ahí son unos diez meses de obras", explica el edil de Hacienda, Juan Bravo. Eso significaría, si se cumple el plazo, plantarse en el verano de 2006, a las puertas de una precampaña electoral -para los comicios de mayo de 2007- que se adivina larga.

"Aún no hemos decidido si el traslado se irá haciendo por fases, a medida que se vayan habilitando los despachos, o si se suspenderá hasta después de 2007, porque a lo mejor para cuatro meses que queden de legislatura no nos compensa hacer la mudanza... Además, en verano de 2006 ya estarán en marcha las otras obras que afectan al edificio, que son de mucha más envergadura", continúa Bravo.

Esas otras obras, que empezarán en marzo de 2006 y durarán "entre 18 y 20 meses" -es decir, tampoco estarán listas en este mandato-, son las que transformarán la parte central del Palacio de Correos en un "espacio cultural público" con salas de exposiciones, un auditorio y puntos de información turística, todo bajo una cubierta traslúcida con forma de burbuja de agua. El proyecto para rehabilitar esa parte "no administrativa" del nuevo Ayuntamiento fue adjudicado al estudio madrileño de arquitectos Arquimática el pasado febrero.

El paquete de inmuebles que el Ayuntamiento ha entregado al Gobierno central a cambio de Correos incluye, además de Capitán Haya, 41, el edificio conocido como Las Cariátides (Alcalá, 49), otro en la calle de los Hermanos Álvarez Quintero, y uno más en el paseo de los Olmos. A eso se suma un solar en el nuevo barrio de Sanchinarro. En total, bienes inmuebles por valor de unos 270 millones de euros, según cálculos municipales (cantidad a la que habrá que añadir, para saber el precio total de la operación, lo que cuesten las obras de rehabilitación). El Ayuntamiento asegura que el Palacio de Correos tiene un valor bastante superior, aunque aún no existe una tasación oficial.

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