¡Ése es mi coche!

Poco podía pensar que él mismo iba a poder recuperar su viejo coche robado unos días antes. Un vecino de Castelldefels de 33 años logró que la Policía Local detuviera el sábado a dos presuntos ladrones de viviendas con orden de búsqueda y captura después de perseguirlos por las calles del municipio al ver que conducían su propio vehículo.

Hacía dos semanas que, al ir a buscarlo donde lo había dejado aparcado, descubrió que ya no estaba allí y que alguien se lo había llevado. Se había dejado las llaves en el interior del coche y los ladrones, en cuestión de segundos, aprovecharon un desc...

Poco podía pensar que él mismo iba a poder recuperar su viejo coche robado unos días antes. Un vecino de Castelldefels de 33 años logró que la Policía Local detuviera el sábado a dos presuntos ladrones de viviendas con orden de búsqueda y captura después de perseguirlos por las calles del municipio al ver que conducían su propio vehículo.

Hacía dos semanas que, al ir a buscarlo donde lo había dejado aparcado, descubrió que ya no estaba allí y que alguien se lo había llevado. Se había dejado las llaves en el interior del coche y los ladrones, en cuestión de segundos, aprovecharon un descuido fácil. Ya pensaba en comprarse uno nuevo. Mientras, pidió prestado otro para poder realizar sus desplazamientos diarios. Pero el sábado, cuando acudió con su coche prestado al centro de Castelldefels para realizar unas compras, vio con gran sorpresa como su vehículo, un Volkswagen Polo de color blanco de unos 15 años, pasaba justo por delante de él con unos desconocidos en su interior.

Se encontraba en una rotonda y su coche iba en sentido contrario. No lo dudó ni un momento. Dio un giro de 180 grados a la plaza y siguió a su coche.

En el interior del vehículo había dos individuos. Los persiguió a lo largo de la avenida de la Constitució en dirección a Sitges. Mientras, llamó por el teléfono móvil a la Policía Local de Castelldefels, que movilizó rápidamente a tres patrullas del cuerpo municipal. Durante todo el trayecto fue informando de la posición en que se encontraban. Sus movimientos extraños fueron captados por los presuntos delincuentes que, según la Policía Local, advirtieron que alguien les estaba siguiendo. Ya habían recorrido más de dos kilómetros de la avenida y se encontraban entre las calles 302 y 307, cuando los coches de los agentes salieron como por ensalmo de las vías perpendiculares, ante el asombro tanto de los perseguidos como del perseguidor.

Cerraron el paso al vehículo robado y uno de los ocupantes salió corriendo del vehículo. En su huida, se puso un casco de obrero e intentó hacerse pasar por un trabajador de la construcción. No obstante, la descripción que los agentes tenían del individuo permitió identificarle.

De esta forma, el vecino consiguió recuperar su viejo Volkswagen Polo, a la vez que colaboró con la policía en la detención de dos personas con una orden de búsqueda y captura y numerosos antecedentes policiales por una larga lista de robos en viviendas de municipios del área metropolitana.

Los dos ladrones tenían por costumbre hacerse pasar por trabajadores en sus robos. La Policía Local encontró en el interior del vehículo ordenadores portátiles y otros objetos que los detenidos habían robado justo antes en casas de la zona de la playa de Castelldefels, donde una vecina había visto a uno de ellos haciéndose pasar por jardinero. Junto al botín había cinco destornilladores de diferentes dimensiones y un pico, con los que forzaban las puertas para entrar en los domicilios. Los detenidos, de nacionalidad chilena, responden a las iniciales R. C. D. B. y J. G. H., y tienen 32 y 31 años, respectivamente. Los agentes locales los entregaron al Cuerpo Nacional de Policía.