El Ayuntamiento de Castellón se gastó 1.470 euros en comprar bragas

Las facturas de una subvención de 15.000 euros que el Ayuntamiento de Castellón otorgó a una concentración de Harley Davidson incluyen 1.470 euros gastados en la compra de bragas, según reveló ayer el portavoz socialista, Ignacio Subías. La organización serigrafió el logotipo del club en las prendas.

El pleno sobre el estado de la ciudad de Castellón destacó ayer por las anécdotas. Sorprendió la intervención final del alcalde de la capital de La Plana, Alberto Fabra, del PP, quien, contra todo pronóstico, decidió tomar el turno de palabra en último lugar. El debate también se animó cuan...

Las facturas de una subvención de 15.000 euros que el Ayuntamiento de Castellón otorgó a una concentración de Harley Davidson incluyen 1.470 euros gastados en la compra de bragas, según reveló ayer el portavoz socialista, Ignacio Subías. La organización serigrafió el logotipo del club en las prendas.

El pleno sobre el estado de la ciudad de Castellón destacó ayer por las anécdotas. Sorprendió la intervención final del alcalde de la capital de La Plana, Alberto Fabra, del PP, quien, contra todo pronóstico, decidió tomar el turno de palabra en último lugar. El debate también se animó cuando el líder de la oposición, el socialista Ignacio Subías, exhibió dos facturas como muestra del "descontrol" en el gasto del dinero público. Una de ellas forma parte de los gastos con los que se justificó una subvención de 15.000 euros que el Ayuntamiento otorgó a una importante concentración de Harley Davidson y que se refiere a 1.470 euros gastados en la compra de bragas.

Según fuentes de la organización, ese dinero fue destinado a la compra de ropa interior femenina en la que se serigrafió el logotipo del club, al igual que se hace en otro tipo de prendas. Además de las bragas y tangas que se adquirieron, la subvención del Ayuntamiento, que contó con el visto bueno del concejal de Cultura, Miguel Ángel Mulet, sirvió para costear diversos actos. La segunda de las facturas da cuenta de los cambios que el nuevo alcalde de Castellón, Alberto Fabra, introdujo en su despacho después de la dimisión de José Luis Gimeno. El documento mostrado por Subías recoge los más de 11.000 euros que Fabra gastó en un tresillo de piel de color marfil.

Otra de las sorpresas fue la ausencia del presidente de la Diputación de Castellón y concejal, Carlos Fabra, en el que era el primer debate sobre el estado de la capital, iniciativa que nació de una propuesta del grupo del Bloc.

El alcalde, Alberto Fabra, basó su intervención en el crecimiento urbanístico de Castellón que, según dijo, ha llevado a aumentar servicios y comunicaciones. Sus palabras finales fueron de crítica para el Gobierno que preside José Luis Rodríguez Zapatero ya que, según dijo, "desde que ha cambiado de signo [el Ejecutivo], la ciudad no ha recibido ni un euro más que lo que ya había comprometido el gobierno del PP en pagos plurianuales". Para el representante del Bloc, Antoni Portar, el crecimiento urbanístico "ha intensificado aquella perversión de hace años de favorecer a grandes grupos económicos, primando los intereses privados sobre los de los ciudadanos".