El nuevo turismo gana terreno

Las actividades deportivas, urbanas y culturales se consolidan como alternativas al tradicional sol y playa en un momento de cambio de hábitos de ocio y caída de ingresos

Tumbarse en la playa y disfrutar del sol no es suficiente para sostener el turismo en España. La competencia en precios de países de la cuenca mediterránea y el estancamiento en el ingreso medio por turista han hecho florecer alternativas, o complementos, al turismo tradicional que se consolidan como negocios con gran proyección.

Uno de ellos, el del golf, genera al año más de 2.000 millones de euros, y otras actividades, como el turismo rural, crecen del orden del 17% cada año, mientras el culto a la salud y al cuerpo ha favorecido la recuperación de obsoletos balnearios y la creación ...

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Tumbarse en la playa y disfrutar del sol no es suficiente para sostener el turismo en España. La competencia en precios de países de la cuenca mediterránea y el estancamiento en el ingreso medio por turista han hecho florecer alternativas, o complementos, al turismo tradicional que se consolidan como negocios con gran proyección.

Uno de ellos, el del golf, genera al año más de 2.000 millones de euros, y otras actividades, como el turismo rural, crecen del orden del 17% cada año, mientras el culto a la salud y al cuerpo ha favorecido la recuperación de obsoletos balnearios y la creación de estaciones termales.

Según los expertos, ninguna de estas alternativas disputan la hegemonía de la playa, pero sí satisfacen los hábitos de un nuevo cliente que opta por acortar sus vacaciones, pero viaja más. En España la media ha pasado de 1,4 viajes al año en 2002 a cuatro viajes.

Turismo urbano, de negocios y cultural tienen todavía un importante recorrido.

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