Reportaje:

Las dos caras de Mapfre

Crece su beneficio un 21,3%, pero no logra su objetivo de adquirir compañías en el exterior

Los buenos resultados de Corporación Mapfre -su beneficio neto ha crecido un 29,4% en 2004 y un 21,3% en el primer trimestre- no destierran la frustración compradora que embarga desde hace más de un año a sus gestores. En los últimos días han perdido un nuevo concurso, el de la adjudicación de la filial brasileña de ABN Amro, Real Seguros, y las inminentes compras de compañías europeas, anunciadas por su presidente, siguen en el terreno de los buenos propósitos.

La primera aseguradora española ha dado en los últimos días una de cal, los resultados del trimestre (véase el cuadro adjunto)...

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Los buenos resultados de Corporación Mapfre -su beneficio neto ha crecido un 29,4% en 2004 y un 21,3% en el primer trimestre- no destierran la frustración compradora que embarga desde hace más de un año a sus gestores. En los últimos días han perdido un nuevo concurso, el de la adjudicación de la filial brasileña de ABN Amro, Real Seguros, y las inminentes compras de compañías europeas, anunciadas por su presidente, siguen en el terreno de los buenos propósitos.

Real es su segundo fiasco en un año, tras el de Seguros e Pensoes, y sigue sin hallar destino a 190 millones previstos para la compra de empresas

La primera aseguradora española ha dado en los últimos días una de cal, los resultados del trimestre (véase el cuadro adjunto), y otra de arena, su exclusión en el concurso de venta de la brasileña Real Seguros.

Corporación Mapfre, que es la división cotizada de Sistema Mapfre y que aporta el 79% de la facturación del grupo, ha alcanzado en los tres primeros meses de este año un crecimiento de sus ingresos del 8,5%.

Un incremento acorde con las expectativas del mercado, apuntan los analistas, que se ha logrado gracias a la contribución de sus filiales en el exterior, en especial las de América Latina, y a la aportación del área de negocio de "no vida". El comportamiento de la rama de "vida" ha sido en estos meses bastante más gris, como ha reconocido Domingo Sugranyes, vicepresidente ejecutivo de Corporación Mapfre. La ralentización de este ramo de actividad, según el directivo, se ha debido a unas "menores renovaciones en los contratos de ahorro en el canal bancario". A 31 de marzo, las primas de vida se habia reducido un 15,7% hasta los 542 millones y el resultado técnico de esta área, que mide el negocio asegurador propiamente dicho, se redujo un 4,3%, aunque fue compensado por los ingresos financieros.

Alianza con Caja Madrid

En cualquier caso, el holding Mapfre-Caja Madrid, que está incorporado a la estructura de la Corporación Mapfre, y que cuenta con una amplia gama de productos y una amplia red en España y América Latina, sigue siendo una de las joyas de la corona del primer grupo asegurador español. Basta ver las cifras. La entidad financiera vendió en 2004 a través de Mapfre productos (hipotecas, financiación de promociones inmobiliarias, recursos de clientes, concesionarios, otros préstamos y leasing no vinculado al automovil) por valor de 1.639 millones de euros. La aseguradora, por su parte, vendió a través de las ventanillas de Caja Madrid productos (vida, seguros generales, salud y empresas) por valor de 902,6 millones de euros.

De ahí que uno de los objetivos que se ha marcado Mapfre para 2005 es ampliar su estructura de comercialización a través de acuerdos de distribución de banca-seguros. Un reforzamiento liderado por su filial Mapfre Seguros Generales, que ya tiene acuerdos de comercialización con Bankinter, Citibank, Banco Pastor y Barclays, entre otras entidades. Son acuerdos muy acotados en sus fines y en su ámbito de aplicación que no compiten ni entran en conflicto con el holding Mapfre-Caja Madrid.

La mayor frustración, sin embargo, en la estrategia de Mapfre es la imposibilidad de hacerse con la propiedad de una gran grupo asegurador en el exterior. El reciente fiasco con Real, en Brasil, es el segundo desde junio de 2004. El primer concurso público que perdió fue el de la adjudicación en Portugal de la com,pañía Seguros e Pensoes, filial del Banco Comercial de Portugal. Fracasos que nada tienen que ver con la falta de recursos. De hecho, en marzo de 2004, Mapfre amplió capital en 500 millones de euros, de los que un 38% (190 millones) estaba destinado a financiar la adquisición de otras compañías.

Las compras, sin embargo, no acaban de cristalizar y están surgiendo las primeras dudas entre los analistas de mercados. Sugrayes, sin embargo, asegura que siguen buscando oportunidades en Brasil y otros países de América Latina (México) y Europa (Portugal, Italia, Grecia, Turquía y Países del Este) y que pronto puede haber novedades.

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