Un riñón mayor de edad

El riñón izquierdo de Aitor Aulestia, el único que le funciona, cumple hoy 18 años en su cuerpo. Su hermano mayor, Gorka, de 47 años, se lo donó tal día como hoy para salvarle la vida, tras contraer una grave enfermedad; un gesto que el receptor, asegura, aún no sabe si hubiera sido capaz de tener.

Ambos cruzaron ayer, de peregrinos, en bicicleta, el duro puerto de O Cebreiro (Lugo), camino de Santiago, con lluvia, viento y niebla. Los dos han querido esperar 18 años para poder protagonizar esta gesta. Pero no es la única. Aitor y Gorka son poseedores de un importante med...

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El riñón izquierdo de Aitor Aulestia, el único que le funciona, cumple hoy 18 años en su cuerpo. Su hermano mayor, Gorka, de 47 años, se lo donó tal día como hoy para salvarle la vida, tras contraer una grave enfermedad; un gesto que el receptor, asegura, aún no sabe si hubiera sido capaz de tener.

Ambos cruzaron ayer, de peregrinos, en bicicleta, el duro puerto de O Cebreiro (Lugo), camino de Santiago, con lluvia, viento y niebla. Los dos han querido esperar 18 años para poder protagonizar esta gesta. Pero no es la única. Aitor y Gorka son poseedores de un importante medallero internacional tanto en ciclismo como en natación. Emprendieron el viaje en Roncesvalles hace una semana. El viernes les esperarán en el Obradoiro gran parte de su familia de Ondárroa, con una importante ausencia, la de Kepa Dambala, su padre, fallecido el pasado 1 de enero. "A él van dedicadas estas pedaladas. Nunca nos falló. Era nuestro mejor amigo", dicen. A la cita acudirán algunos de los médicos que realizaron la operación en el hospital Clínico de Barcelona en 1987. Habrán sido 850 kilómetros, a una media de 80 diarios, con una climatología adversa, demostrando que el esfuerzo tiene su recompensa. Los dos han dejado atrás un montón de amigos, como Remedios Ferreiro, dueña del bar Puerto, en el alto do Poio (Lugo), que no dudó en compartir ayer el pulpo con cachelos y la zorza al amor de la lumbre. Tan impresionados están de la acogida en los pueblos del Camino, que han prometido que volverán, y esta vez, andando.-

Los hermanos Aitor y Gorka Aulestia, a su paso por Poio, en su camino hacia Santiago.CARLOS TORIBIO

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