Inteligencia artificial en los pies

Un equipo de cerebros del diseño ultramoderno ha creado una zapatilla de deporte inteligente, vamos, con vida propia. Aparentemente es normal, pero lleva debajo una amortiguación sabia a base de sensores, imanes y un pequeño chip que acciona sistemas de cables impulsados por un micromotor (la pila, que se cambia, le dura 100 horas). Este hecho de ciencia ficción, anunciado esta semana y que se acerca aceleradamente a nuestra realidad diaria ha sido concebido por Ed Musho, desarrollador de ideas en Adidas junto a cuatro jóvenes lumbreras del diseño actual que han tra...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Un equipo de cerebros del diseño ultramoderno ha creado una zapatilla de deporte inteligente, vamos, con vida propia. Aparentemente es normal, pero lleva debajo una amortiguación sabia a base de sensores, imanes y un pequeño chip que acciona sistemas de cables impulsados por un micromotor (la pila, que se cambia, le dura 100 horas). Este hecho de ciencia ficción, anunciado esta semana y que se acerca aceleradamente a nuestra realidad diaria ha sido concebido por Ed Musho, desarrollador de ideas en Adidas junto a cuatro jóvenes lumbreras del diseño actual que han trabajado en secreto durante más de tres años en un laboratorio de Portland: Bob Lucas y Scott Tomlison, diseñadores industriales; Mark Oleson, ingeniero electromecánico, y Christian di Benedetto, jefe del llamado team de innovación. La zapatilla de marras "siente, comprende y se adapta", según explica entusiasmado Erich Stamminger, inventor del lema "Nada es imposible", que le ha dado la vuelta al mundo del sporwear como símbolo de la casa de las tres bandas. Este hallazgo es más importante de lo que puede parecer y cambiará muchas cosas: el sensor hace 1.000 lecturas por segundo y las envía al cerebro de la zapatilla. Ésta es la idea del anuncio sideral dirigido por Spike Jonze, con fotografía de Ellen Kuras y música de Squeak E. Clean, que está protagonizado por el músico Karen O, del grupo Yeah Yeah Yeahs. El futuro está ya en los pies de los corredores.-

Archivado En