Entrevista:HABLEMOS DE MADRID

"Hace falta un modelo de ciudad"

"Madrid no tiene un modelo de ciudad. Tiene una lógica de crecimiento a toda costa. Vende una gestión galáctica de grandes operaciones. Es una ciudad muy condicionada por la gestión publicitaria, en la que hay poca reflexión estratégica. Hay información dispersa y no tenemos una visión integrada de lo que es Madrid".

Éste es el diagnóstico que Fernando Prats, un profesional con gran experiencia en el urbanismo y la arquitectura, emite sobre Madrid. "Hace falta un proyecto estratégico para la ciudad", dice. "A Madrid le falta una reflexión de forma compartida. Los madrileños estamos muy ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

"Madrid no tiene un modelo de ciudad. Tiene una lógica de crecimiento a toda costa. Vende una gestión galáctica de grandes operaciones. Es una ciudad muy condicionada por la gestión publicitaria, en la que hay poca reflexión estratégica. Hay información dispersa y no tenemos una visión integrada de lo que es Madrid".

Éste es el diagnóstico que Fernando Prats, un profesional con gran experiencia en el urbanismo y la arquitectura, emite sobre Madrid. "Hace falta un proyecto estratégico para la ciudad", dice. "A Madrid le falta una reflexión de forma compartida. Los madrileños estamos muy alejados de los proyectos que se diseñan". Prats es partidario del diálogo en la gran ciudad. "Haría falta, por ejemplo, llegar a un pacto sobre diez grandes temas. Haría falta que todos tuviéramos claro qué nos interesa y las conclusiones se tradujeran en un plan de acción y que a partir de ese punto entrara a trabajar un observatorio para que hiciera un seguimiento de todo ello".

"La obra de la M-30 carece de estudios de movilidad. Generará mayor congestión"
"Madrid 2012 es un buen banderín de enganche para hacer políticas de ciudad"
"Se premia la gestión publicitaria y se renuncia a un proyecto estratégico"

-Está hablando de una Agenda 21 para Madrid; es decir, de un diagnóstico, un objetivo y participación.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

-O, lo que es lo mismo, un plan estratégico de Madrid. Se han hecho muchas cosas, pero se han quedado en nada. Han nacido y muerto sin ninguna predicción real sobre la sociedad. Hace falta un proyecto de la sociedad para Madrid.

Fernando Prats propone trabajar sobre cuatro aspectos: economía, cohesión social, calidad del medio urbano y medio ambiente. "Necesitamos un proyecto económico para saber dónde va a estar la competitividad en los próximos años, que, desde luego, no es la apuesta por el sector inmobiliario que hemos vivido. Necesitamos, además, cohesión social. Tenemos 800.000 inmigrantes por los que ¿estamos haciendo algo aparte de dejarles que sobrevivan? ¿Estamos haciendo algo por integrarlos? Y todo esto sucede en la sociedad de la abundancia... Hay dinero a punta de pala. Los depósitos bancarios se han multiplicado por seis en cinco años. Ésta es una sociedad poco vertebrada y el futuro va a ser cada vez más complicado", augura.

Prats también añade la necesidad de analizar la calidad del medio urbano y se pregunta: "¿Vámos a una ciudad donde el entorno urbano va a ser mejor, donde el tráfico será menos intenso, donde el estrés vaya a disminuir? Intituivamente respondemos a todo que no".

"La reflexión sobre esta ciudad también debería pasar por el medio ambiente. Madrid es un foco de metabolismo urbano insostenible. Recientemente se ha hecho un análisis a través del programa Corin que indica que Madrid en los ultimos 10 años ha crecido un 50%. Cada vivienda que se hace supone un gran impacto ambiental en su ciclo de uso. ¿Vamos a una ciudad con menos ruidos, vamos a emitir menos dióxido de carbono que ahora? La respuesta es preocupante", insiste.

La conclusión: "Así que si en lo que económico vamos a una política especulativa, si en lo social no estamos seguros de avanzar en la cohesión social, si no estamos seguros de que vayamos a una sociedad más amigable, yo me pregunto si toda esta riqueza de los últimos 25 años está siendo aprovechada".

-Pero Madrid tiene algunos proyectos en marcha, como, por ejemplo, la reforma de la M-30.

-Ésta es la ciudad con más carreteras del mundo. Vas por Boadilla o por Brunete y todo está lleno de carreteras. Todo es territorio para ser construido. Estamos ante un crecimiento ilimitado. La M-30 es una operación muy cara en primer lugar. Hablan de cerca de 4.000 millones. Una ciudad, cuando invierte tanto, se lo tiene que pensar mucho. La M-30 es una operación a la que le haría dos críticas. Por un lado, se ha desaprovechado la oportunidad de articularla con la sociedad, ya que los periodos de información pública han sido atropellados y, por tanto, no es un proyecto de todos. Y por otro, no está articulada hacia una estrategia de mejora de la movilidad. Quien ha hecho la M-30 no ha puesto encima de la mesa los estudios necesarios para demostrar que su reforma va a mejorar la movilidad de la ciudad. Y como no se ha hecho así, lo más probable es que genere mayor accesibilidad hacia el centro y, por tanto, mayor congestión.

-En Madrid se está empezando a hablar de medidas para restringir el trafico y en cambio se trabaja en la remodelación de la M-30.

-Son medidas contradictorias. Es esa falta de visión estratégica global a la que me refiero. Hay que gastar el dinero con prioridades. Madrid es una ciudad muy rica, pero nos han metido en la cabeza que un alcalde tiene que ser un magnífico gestor; tiene que serlo, pero no es suficiente, debe ser además un buen político. No digo que el alcalde actual no lo sea. Lo que digo es que se premia la gestión y la comunicación mediática y se renuncia a un proyecto político estratégico para Madrid.

"Hay ciudades europeas", continúa Prats, "en las que ha logrado disminuir la intensidad del tráfico. Madrid tiene un buen transporte, pero sigue estando congestionada. Debe ser por una mala gestión de la movilidad".

Este urbanista cree que la implicación de la ciudadanía se logra con "decisión política". Y apunta a Madrid 2012 como una oportunidad para que algunas cosas comiencen a cambiar.

"En Barcelona 92 supieron aprovechar esta oportunidad. Supieron involucrar a la ciudad en sus planes. Cogías un taxi y el taxista te contaba el proyecto olímpico. Eso era fantástico. Madrid, aunque posee mucho respaldo institucional, tiene un proyecto al que le falta ser ilusionante para los madrileños y para toda España. Pero, efectivamente, es una gran oportunidad para, alrededor del 2012, poder introducir este tipo de objetivos, que son necesarios", señala.

"Alrededor de Madrid 2012 se habla de arquitectura sostenible, de Juegos sin vehículos privados, de mejorar la calidad del aire, de apostar por las energías renovables... Eso está bien planteado, es un buen banderín de enganche para hacer políticas de ciudad. Está bien utilizar una oportunidad tan emblemática para hacer no sólo unos buenos Juegos Olímpicos, sino para realizar un gran proyecto de ciudad. Los Juegos son la gran oportunidad para alcanzar un gran pacto sobre la ciudad. Hay que volver a recuperar la idea de qué grandes temas hay que plantearse. Eso está en germen en Madrid 2012. Yo sé que la oficina olímpica tienen planes y trabajan en ello, pero deben pactar con la sociedad y fijar objetivos concretos. Me preocuparía que todo quedara en una política de pantalla y no de realidad. Habría que hacer un observatorio en el que ONG, universidades, colegios profesionales y asociaciones hicieran un seguimiento de esos objetivos".

Prats pone como ejemplo del peligro que conllevan las decisiones sin reflexión lo que puede suceder con el carril bici que se está construyendo en Madrid. "En Barcelona se lo plantearon en serio. No dijeron: 'Inauguro un carril bici'. Estuvieron tres años negociando con las asociaciones de ciclistas y, al cabo del tiempo, se llegó a un acuerdo, de tal manera que el día que se inauguró se estaba seguro de que eso obedecía a una necesidad. Aquí se inauguran cosas sin que se sepa si obedecen a una necesidad social", afirma.

Prats se apoya en datos para seguir denunciando la falta de reflexión. "Tenemos poca vivienda de alquiler. Tenemos muchas viviendas vacías, pero tenemos, en cambio, a muchos jovenes en casa de sus padres porque no pueden pagarse una vivienda. Son contradiciones increíbles. Hay que generar cohesión y medio ambiente. Ésta es la mejor apuesta que puede hacer Madrid. Tenemos mucho dinero, pero no lo estamos haciendo bien".

Madrid afronta ahora un plan para revitalizar el centro, algo que se conoce como "la cirugía del centro". "Es una operación lanzada con precitación que puede quedarse en una cuestión de marketing. Es como lo que ha sucedido con la Operación Chamartín y con los nuevos barrios. Han sido ocasiones perdidas".

Prats, en cambio, considera que Madrid tiene una operación en marcha "muy importante": la Operación Campamento. "Permitirá a la ciudad tener viviendas a precios asequibles".

Y, aunque el análisis de este arquitecto sobre Madrid es negativo, su prónostico invita a la esperanza: "Madrid demostró el 11-M que es una ciudad que no es temerosa. Ésta es una sociedad a la que todavía le funcionan valores muy importantes, lo que pasa es que no está al día".

Fernando Prats

Arquitecto y urbanista. Nació en Madrid hace 61 años. Es autor de la Agenda Local 21 de Calvià, de la Estrategia Integral Lanzarote en la Biosfera y de la Estrategia Turístico-territorial de Doñana. Es experto en evaluación de sostenibilidad de proyectos urbanos. Está escribiendo el Libro Blanco de la Edificación Sostenible en España

Sobre la firma

Archivado En