Un ministro francés, obligado a dejar un piso de 600 metros

Hervé Gaymard, ministro de Economía francés, se vio obligado ayer a renunciar a la vivienda de 600 metros cuadrados que le costaba al Estado 14.000 euros al mes. La noticia de que Gaymard, de 44 años, y su familia estaban instalados desde el 1 de febrero en un lujoso dúplex de París la publicaba ayer el semanario satírico Le Canard Enchaîné. Según el semanario, el ministerio tuvo que pagar la reforma para comunicar internamente los dos pisos que ahora constituían la vivienda.

A media mañana, el ministro mantenía la boca cerrada al ser interrogado por varios periodistas a la salid...

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Hervé Gaymard, ministro de Economía francés, se vio obligado ayer a renunciar a la vivienda de 600 metros cuadrados que le costaba al Estado 14.000 euros al mes. La noticia de que Gaymard, de 44 años, y su familia estaban instalados desde el 1 de febrero en un lujoso dúplex de París la publicaba ayer el semanario satírico Le Canard Enchaîné. Según el semanario, el ministerio tuvo que pagar la reforma para comunicar internamente los dos pisos que ahora constituían la vivienda.

A media mañana, el ministro mantenía la boca cerrada al ser interrogado por varios periodistas a la salida de la Asamblea Nacional; poco después el ministerio publicaba una nota explicando que Gaymard había actuado legalmente, ya que está previsto que si la vivienda que pone a su disposición el ministerio no resulta adecuada, el titular tiene derecho a alquilar una pagada por el erario público. A última hora de la tarde, otro comunicado anunciaba que Gaymard "renunciaba" a ocupar la polémica vivienda.

El problema de Gaymard es que tiene que alojar a su esposa, ocho hijos y cinco empleados. A finales del pasado diciembre, el presidente Jacques Chirac le encomendó la tarea de reemplazar a Nicolas Sarkozy en la cartera de Economía cuando éste se vio obligado a dejar el Gobierno al hacerse cargo de la dirección de la UMP, el partido gubernamental. Pasadas las fiestas de Navidad descubrió que ninguno de los apartamentos que le ofrecía el Ministerio de Economía en su sede de Bercy tenía la capacidad para acoger a tan numerosa familia. Llegó a plantearse la posibilidad de que ocuparan dos viviendas, pero fue descartada porque estaban demasiado separadas.

El otro problema del ministro de Economía, uno de los miembros del Gobierno más próximo al presidente Chirac, es que en estas últimas semanas se había convertido en el portavoz de la campaña de austeridad centrada, especialmente, en el recorte del gasto público para reducir el déficit.

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