Mercados inactivos
El ambiente de casi vacaciones que viven los mercados de valores en estos días se vio ayer acrecentado para las bolsas europeas por el cierre de la Bolsa de Londres, cuya canalización de órdenes hacia los mercados del continente es muy importante. Esta situación se mantendrá también hoy, festividad de San Esteban en el Reino Unido, con lo que hay ya muchos inversores que dan el ejercicio por cerrado.
El bajo nivel de las operaciones permitió el libre juego de la inversión local, que al final no supo bien qué hacer con esa opción y dejó todo como estaba. El Ibex 35 terminaba la sesión co...
El ambiente de casi vacaciones que viven los mercados de valores en estos días se vio ayer acrecentado para las bolsas europeas por el cierre de la Bolsa de Londres, cuya canalización de órdenes hacia los mercados del continente es muy importante. Esta situación se mantendrá también hoy, festividad de San Esteban en el Reino Unido, con lo que hay ya muchos inversores que dan el ejercicio por cerrado.
El bajo nivel de las operaciones permitió el libre juego de la inversión local, que al final no supo bien qué hacer con esa opción y dejó todo como estaba. El Ibex 35 terminaba la sesión con un descenso del 0,04% y en 9.050,70 puntos, pero no sin antes marcar un nuevo máximo anual intradía en 9.075,70. El índice general de la Bolsa de Madrid terminó en 955,35 puntos tras bajar el 0,07%.
La contratación en el Mercado Continuo se quedó en 1.311,87 millones de euros, de los que el 40% correspondió a operaciones institucionales. Del resto, más de la mitad se concentraba en los cinco principales valores.
El conjunto de los mercados europeos tampoco contó con la tensión suficiente como para entrar a valorar el importante descenso del precio del petróleo que, en Estados Unidos, cayó un 6,47% hasta los 41,32 dólares el barril. La indecisa apertura de la Bolsa de Nueva York, que perdía el 0,16% a media sesión y finalmente cerró con un retroceso del 0,47%, privó a las bolsas europeas de una dirección concreta.
Para los escasos habituales del mercado que ayer acudieron al parqué madrileño, el ejercicio está prácticamente cerrado y tan sólo quedan pequeñas dudas de última hora sobre el comportamiento de la Bolsa en los primeros días de enero.
El tirón de las cotizaciones del último mes, con volúmenes de contratación más bien escasos, ha servido para dividir a analistas e inversores sobre la capacidad del mercado para soportar esos precios en el arranque del próximo ejercicio, aunque la debilidad que continúa mostrando el dólar puede seguir forzando el trasvase de fondos hacia la zona euro en busca de unos beneficios adicionales.