Cadena de máximos
Los máximos anuales continúan llegando a la Bolsa española sin esfuerzos aparentes por parte de los inversores, ya que los volúmenes negociados siguen siendo demasiado bajos para justificar los avances de muchas cotizaciones.
El Ibex 35 cerró en 8.941,80 puntos, nuevo máximo anual absoluto, con una subida del 0,53%, al tiempo que el índice general de la Bolsa de Madrid ganaba el 0,47% para cerrar en 945,74.
Los movimientos corporativos, tanto los conocidos como los posibles, están detrás de una buena parte de los avances de los valores españoles, que continúan incrementando la di...
Los máximos anuales continúan llegando a la Bolsa española sin esfuerzos aparentes por parte de los inversores, ya que los volúmenes negociados siguen siendo demasiado bajos para justificar los avances de muchas cotizaciones.
El Ibex 35 cerró en 8.941,80 puntos, nuevo máximo anual absoluto, con una subida del 0,53%, al tiempo que el índice general de la Bolsa de Madrid ganaba el 0,47% para cerrar en 945,74.
Los movimientos corporativos, tanto los conocidos como los posibles, están detrás de una buena parte de los avances de los valores españoles, que continúan incrementando la diferencia con otras plazas europeas. Mientras que el Ibex 35 acumula una subida anual del 15,57%, el índice DAX de la Bolsa de Francfort gana el 6,29%, el CAC 40 de París el 5,96% y el Dow Jones de valores industriales de la Bolsa de Nueva York ganaba el 2,61% con datos de media sesión.
Esta peculiar situación del mercado español justifica que las ganancias se produzcan con poco dinero, pues se concentra allí donde es preciso y el resto es simple inercia. La contratación en el Mercado Continuo fue ayer de 2.941,16 millones de euros, de los que casi la mitad procedían de operaciones institucionales, muy abundantes en este tramo final del ejercicio.
La situación de conjunto apunta hacia una relativa búsqueda de liquidez por parte de los inversores más ágiles, que es más evidente en el resto de los mercados europeos, en los que las noticias que llegan de las empresas todavía se refieren más a los recortes de empleo que a movimientos corporativos importantes. En cuanto a los indicadores económicos, su ausencia fue ayer lo más destacable, lo que permitía a las bolsas disfrutar de una sesión de calma relativa gracias al descenso del precio del petróleo.
El informe del instituo alemán IFO, rebajando las expectativas del IPC de 2005 en tres décimas, hasta el 1,2%, enfrió el ambiente en la Bolsa de Francfort, que cerraba con un avance del 0,07%. París ganó el 0,16% y Londres el 0,04%, mientras que Nueva York ganaba el 0,67% a media sesión.