La inseguridad y las intimidaciones ponen en peligro las elecciones en Afganistán
La inseguridad y las intimidaciones sobre los votantes en Afganistán, un país que carece de una cultura democrática profunda, representan un peligro para el desarrollo de las elecciones presidenciales previstas para el 9 de octubre, asegura un informe de Comisión Independiente de Derechos Humanos en Afganistán (AIHRC, en sus siglas en inglés) encargado por Naciones Unidas.
"El control que los señores de la guerra ejercen sobre los votantes puede distorsionar la libre expresión de los votantes", explicó a la cadena BBC Sima Samar, presidenta de
AIHRC, organización que inves...
La inseguridad y las intimidaciones sobre los votantes en Afganistán, un país que carece de una cultura democrática profunda, representan un peligro para el desarrollo de las elecciones presidenciales previstas para el 9 de octubre, asegura un informe de Comisión Independiente de Derechos Humanos en Afganistán (AIHRC, en sus siglas en inglés) encargado por Naciones Unidas.
"El control que los señores de la guerra ejercen sobre los votantes puede distorsionar la libre expresión de los votantes", explicó a la cadena BBC Sima Samar, presidenta de
AIHRC, organización que investigó en julio, por encargo de Naciones Unidas, la situación de los derechos políticos en este país. El informe también advierte sobre "la inseguridad en aquellas áreas donde los grupos extremistas se han propuesto, por medios violentos, dificultar un proceso político que temen", agregó Samar sobre las amenazas que los talibanes y otros grupos radicales, muy arraigados en el sur del país, han pronunciado contra los comicios.
"Estos problemas tienen que ser tratados en las próximas semanas si queremos que las elecciones se celebren de forma democrática", dijo Samar, quien agregó: "No esperamos que las elecciones sean democráticas en un 100%. Nos conformaríamos con un 60%". Las elecciones presidenciales, que se celebrarán el 9 de octubre, mientras que las generales han sido retrasadas hasta 2005, contarán con la protección de las tropas internacionales de la ISAF, que han recibido importantes refuerzos, entre ellos un millar de soldados españoles.