Las empresas de grúas negocian con Azkuna la manifestación de 500 vehículos
Si entran en un Bilbao en plenas fiestas lo colapsarán, y si no lo hacen, su protesta no tendrá el eco que buscan. Las empresas de grúas de Euskadi, agrupadas en la asociación Abeac, están negociando esa situación con el alcalde bilbaíno, Iñaki Azkuna, ya que unos 500 transportes
de todas las comunidades de la mitad norte de España han confirmado que participarán en la gran concentración de protesta convocada para el miércoles en los campos de Llumbe, en el barrio bilbaíno de La Peña.
La asociación Abeac, que agrupa al 85% del sector vasco, mantiene la huelga desde el 27 de juli...
Si entran en un Bilbao en plenas fiestas lo colapsarán, y si no lo hacen, su protesta no tendrá el eco que buscan. Las empresas de grúas de Euskadi, agrupadas en la asociación Abeac, están negociando esa situación con el alcalde bilbaíno, Iñaki Azkuna, ya que unos 500 transportes
de todas las comunidades de la mitad norte de España han confirmado que participarán en la gran concentración de protesta convocada para el miércoles en los campos de Llumbe, en el barrio bilbaíno de La Peña.
La asociación Abeac, que agrupa al 85% del sector vasco, mantiene la huelga desde el 27 de julio para exigir a las compañías de seguros que actualicen sus tarifas. Un estudio de la Universidad de Alicante encargado por la asociación concluye que el coste real de cada servicio asciende a 50 euros, mientras que las aseguradoras pagan una media de 22, según los gruístas. Por igual servicio en el sur de Francia, las mismas aseguradoras pagan 60 euros.
Abeac está estudiando con Azkuna la posibilidad de trasladar la concentración a Derio y así evitar el colapso ciudadano. A cambio, pide que una representación de las 500 grúas, unas 50, pueda recorrer la capital para que se visualice su protesta.
Tras casi tres semanas en huelga, más de 3.000 coches accidentados y averiados pueblan las cunetas y gasolineras de Euskadi. Desde mañana, si las dos partes no han llegado a un acuerdo, las grúas prestarán el servicio de recogida, pero tendrán que pagarlo los conductores. La tarifa ascenderá a entre 50 y 60 euros, y sólo responderán a las llamadas directas de los usuarios, no de las aseguradoras. El mismo día de la concentración se sabrá si el resto de profesionales de la mitad norte de España se suma a la huelga.
La Ertzaintza indicó ayer que el conflicto no está creando excesivos problemas de tráfico en las carreteras vascas. Más le preocupa la actuación de ladrones, por lo que ha establecido mecanismos de vigilancia para evitar los robos en los vehículos abandonados en las cunetas.