El Ministerio pagará a plazos los 6 millones de euros que faltan para acabar el MNAC
El patronato debate la necesidad de cambiar el nombre del museo y quitarle 'Nacional'
Buenas intenciones, pero pocas concrenciones. Los tres representantes del Ministerio de Cultura en el patronato del Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) informaron el pasado lunes al pleno de este organismo que aceptan asumir los seis millones de euros que faltan para acabar las obras del museo. Pero pagarán a plazos, lo que obligará al centro a solicitar un crédito cuyos intereses, en principio, asumirá el ministerio. Respecto a su futura aportación al presupuesto ordinario del centro es algo que aún deberá estudiarse, pero no se descarta.
El patronato del MNAC, que preside el ex ...
Buenas intenciones, pero pocas concrenciones. Los tres representantes del Ministerio de Cultura en el patronato del Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) informaron el pasado lunes al pleno de este organismo que aceptan asumir los seis millones de euros que faltan para acabar las obras del museo. Pero pagarán a plazos, lo que obligará al centro a solicitar un crédito cuyos intereses, en principio, asumirá el ministerio. Respecto a su futura aportación al presupuesto ordinario del centro es algo que aún deberá estudiarse, pero no se descarta.
El patronato del MNAC, que preside el ex ministro de Defensa Narcís Serra, aprobó ayer el presupuesto ordinario de 2004 que supera los 12 millones de euros y que, es de preveer, deberá casi duplicarse a partir del próximo año ya que con la finalización, en diciembre, de las obras, el centro pasará a tener unos 40.000 metros cuadrados, lo que implicará muchos más gastos de mantenimiento, personal y también de actividades.
En estos momentos, el presupuesto ordinario del MNAC lo asumen la Generalitat, que aporta el 70%, y el Ayuntamiento, que asume el resto. Tanto una como otra institución querrían que el Ministerio de Cultura participara también en estos gastos y considerara el MNAC un centro de interés estatal con todas las consecuencias. En principio, la tesis de la ministra de Cultura, Carmen Calvo, es la misma que sus antecesores en el cargo. Es decir, el ministerio se hace cargo sólo de los museos estatales y, sin descartar ayudas concretas, cada autonomía debe gestionar y financiar sus propios museos. Con todo, según fuentes cercanas al patronato, el pasado lunes los responsables ministeriales en la reunión no descartaron la posibilidad de hacer una excepción con el MNAC, aunque quedaría un largo periodo de negociación que incluiría también el porcentaje que podría asumir el Estado.
Sin la N de Nacional
Uno de los puntos de debate en la reunión del patronato se centró en la campaña publicitaria que se quiere lanzar a finales de año con motivo de la inauguración completa del edificio. Una de las propuestas implicaba la eliminación de la "ene" de Nacional para hacer más fácil la lectura del nombre del centro. Así, en lugar de Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) pasaría a llamarse Museo de Arte de Cataluña (MAC), que era como se conocía antes de la Ley de Museos. Una parte de los miembros del patronato lo apoyaba, pero otros alertaron de que este cambio es complicado a nivel administrativo, ya que implicaría la modificación de la ley, al tiempo que provocaría la confusión entre el MNAC y el Museo de Arqueología de Cataluña (MAC), que, además, también está situado en la falda de Montjuïc. Sería, explican, "desvestir a un santo para vestir a otro". En todo caso, parece que hay acuerdo en el patronato sobre la necesidad de cambiarle el nombre al museo o simplificarlo, si bien la decisión definitiva no se tomará hasta que en septiembre se reúna la comisión delegada.
Las obras, de momento, mantienen el calendario previsto y el objetivo prioritario del presidente del museo, Narcís Serra, es inaugurarlo a finales de diciembre en una fecha que aún no se ha definido. La campaña publicitaria se acompañará también de una revitalización de las actividades del museo, un área que se pretende potenciar en el futuro. De momento, desde principios de julio el museo cuenta ya con una responsable de actividades, Núria Fradera, que en los últimos años había sido la directora del área de patrimonio del Instituto de Cultura de Barcelona.