El manchón

Hace tres o cuatro meses, unas obras realizadas por Iberdrola en la calle Baiona (Iralabarri), dejaron un manchón de grasa vertido por alguna de las maquinas que utilizaron para la obra. Al ver que el manchón seguía y nadie (ni Iberdrola ni Ayuntamiento de Bilbao) hacían nada me puse en contacto con las BAI (Brigadas de Actuación Inmediata del Ayuntamiento). A la semana me llamaron diciéndome que habían visto el manchón y que querían confirmar que efectivamente había sido una obra de Iberdrola, para obligar a ésta a que la limpiara. He de reconocer que me sorprendió gratamente.

Al pasar...

Hace tres o cuatro meses, unas obras realizadas por Iberdrola en la calle Baiona (Iralabarri), dejaron un manchón de grasa vertido por alguna de las maquinas que utilizaron para la obra. Al ver que el manchón seguía y nadie (ni Iberdrola ni Ayuntamiento de Bilbao) hacían nada me puse en contacto con las BAI (Brigadas de Actuación Inmediata del Ayuntamiento). A la semana me llamaron diciéndome que habían visto el manchón y que querían confirmar que efectivamente había sido una obra de Iberdrola, para obligar a ésta a que la limpiara. He de reconocer que me sorprendió gratamente.

Al pasar otro mes y no ver en el manchón más que la pequeña modificación que la lluvia y el tiempo habían ejercido sobre él, volví a llamar a las BAI y dejé un nuevo mensaje. Desde entonces no he vuelto a tener más noticias y el manchón sigue el lento curso que la lluvia (cada vez menos) y el tiempo (cada vez más) ejercen sobre él. Uno piensa que hubiera pasado si, por ejemplo, se me hubiera caído a mi una garrafa de aceite y alguien me hubiera denunciado.