El primer foro del congreso defiende la Ley de la Violencia de Género y llama a no escatimar recursos
El esquema básico del congreso regional del PSOE se enriquece en esta edición con tres foros de discusión sobre las distintas propuestas del partido. El primero de ellos, celebrado ayer, versó sobre la violencia contra las mujeres. La consejera de Igualdad y Bienestar Social, Micaela Navarro, el forense Miguel Lorente y la cantante y activista feminista Cristina del Valle explicaron sus visiones del fenómeno después de ver la película Te doy mis ojos, de Iciar Bollaín. El debate lo moderó la secretaria de Igualdad, Maribel Montaño, y se abrió a todos los asistentes, en su mayoría mujere...
El esquema básico del congreso regional del PSOE se enriquece en esta edición con tres foros de discusión sobre las distintas propuestas del partido. El primero de ellos, celebrado ayer, versó sobre la violencia contra las mujeres. La consejera de Igualdad y Bienestar Social, Micaela Navarro, el forense Miguel Lorente y la cantante y activista feminista Cristina del Valle explicaron sus visiones del fenómeno después de ver la película Te doy mis ojos, de Iciar Bollaín. El debate lo moderó la secretaria de Igualdad, Maribel Montaño, y se abrió a todos los asistentes, en su mayoría mujeres.
Navarro aprovechó su exposición inicial para tratar de desmontar los argumentos de los miembros del Consejo General del Poder Judicial que informaron negativamente el proyecto de Ley Integral sobre la Violencia de Género argumentando que vulneraba el derecho a la igualdad. La consejera utilizó un símil con la legislación antiterrorista. "Se supone que vivimos en un país con un Código Penal que condena todos los delitos", dijo Navarro. "¿Cómo es posible que quemar un coche no tenga la misma pena en Murcia y en Bilbao?", se preguntó.
El caso de ETA
La consejera argumentó que al igual que en el caso de ETA, la ley integral establece una diferencia por el motivo del delito. "Lo que pretende el terrorismo es romper el poder establecido mientras que los agresores quieren mantenerlo", explicó Navarro.
Lorente se refirió al contexto en el que se desarrollan este tipo de agresiones, una sociedad en la que se justifica la violencia por amor o la guerra por la paz sin tener en cuenta que cualquier manifestación violenta es excesiva. El forense explicó que es preciso actuar sobre ese contexto para acabar con el fenómeno. El derecho, según Lorente, se ha demostrado ineficaz. "La protección extra que necesitan las mujeres se refleja en la propia realidad", argumentó el asesor parlamentario en violencia de género que recordó que una encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas sobre el tema recoge que el 75% de los españoles denunciarían una agresión contra una mujer. "Eso deja un margen a la impunidad", dijo.
La más crítica con la situación actual fue, sin embargo, Cristina del Valle que dibujó un panorama con códigos impuestos por los hombres en todos los ámbitos de la sociedad. Valle, que sufrió los malos tratos en carne propia, dedicó su intervención a desmontar varios clichés muy extendidos, como el que reduce los maltratos a las clases deprimidas o los relaciona con el alcohol. "Los maltratadores utilizan el alcohol como un elemento que facilita la agresión. El agresor diseña la agresión premeditadamente y bebe para poder perpetrarla, algo que sin embargo la ley considera un atenuante", afirmó.
La cantante y presidenta de la Plataforma de Mujeres Artistas contra la Violencia de Género, aseguró que los hijos de los agresores son también víctimas de las agresiones aunque no reciban los golpes. "No son meros espectadores, sino niños heridos, porque un maltratador nunca es un referente educativo", dijo Valle, que llamó "cómplices" de la violencia de género a los jueces contrarios al proyecto de ley.