Desarticulada una red que robaba antigüedades
La Guardia Civil ha detenido en Carmona (Sevilla), en el marco de una operación denominada Pilastras, a 10 personas acusadas de pertenecer presuntamente a una banda que se dedicaba a robar en las provincias de Córdoba y Sevilla elementos arquitectónicos antiguos.
Las investigaciones comenzaron hace más de un año, cuando comenzaron a denunciarse en la zona numerosos robos de piezas artísticas. Desde el principió quedó claro a los investigadores que los robos coincidían tanto en su modus operandi como en las especiales características de los objetos sustraídos. Todas las pie...
La Guardia Civil ha detenido en Carmona (Sevilla), en el marco de una operación denominada Pilastras, a 10 personas acusadas de pertenecer presuntamente a una banda que se dedicaba a robar en las provincias de Córdoba y Sevilla elementos arquitectónicos antiguos.
Las investigaciones comenzaron hace más de un año, cuando comenzaron a denunciarse en la zona numerosos robos de piezas artísticas. Desde el principió quedó claro a los investigadores que los robos coincidían tanto en su modus operandi como en las especiales características de los objetos sustraídos. Todas las piezas tenían gran valor histórico y artístico y eran pertenecientes a periodos comprendidos entre la época romana y el siglo XVI.
Entre los objetos recuperados se han encontrado 114 vasijas de norias árabes; siete oxibeles (proyectiles para catapultas); siete pilastras de columnas robadas de cortijos cordobeses; dos aldabones de época romana y una piedra de molino árabe extraída de una noria de agua de Córdoba. Todos los objetos robados pasaban luego a engrosar los circuitos de compra y venta del mercado negro nacional. La Guardia Civil centró las investigaciones en coleccionistas de objetos antiguos de la zona de Carmona.
Las primeras detenciones se produjeron gracias a que algunos testigos relataron que los atracadores usaban una furgoneta Citroën C 15 de color gris. A partir de este dato y gracias a la colaboración ciudadana pudo localizarse el vehículo justo en el momento en el que sus dos ocupantes estaban realizando un nuevo robo de obras históricas.
A partir de ese momento los diez integrantes de la red, la mayoría de ellos vecinos de Carmona, comenzaron a ser detenidos. La organización estaba formada por miembros que sustraían las piezas e intermediarios (propietarios de establecimientos de hostelería y restauradores de antigüedades) que las hacían llegar a las personas vinculadas con el coleccionismo privado.
Con estos arrestos la Guardia Civil cree haber desmantelado la red local de comercio sumergido centrado en el expolio y compra venta de piezas, algunas de ellas milenarias, pertenecientes a monumentos, edificios históricos, yacimientos arqueológicos y viviendas antiguas.