El centro cultural Okendo de San Sebastián reabre sus puertas tras dos años cerrado por obras de ampliación

El centro cultural Okendo de San Sebastián se reincorporará el próximo mes de marzo a la actividad cultural y social de la ciudad. Volverá a abrir sus puertas al público tras dos años de obras de ampliación y con cinco meses de retraso respecto a la fecha inicialmente prevista.

Ubicado en el barrio donostiarra de Gros, el centro ha multiplicado por más de cuatro su superficie anterior: 600 metros cuadrados repartidos en las dos plantas de la casa de origen medieval en la que nació el almirante Okendo. A este espacio ha sumado 2.000 metros, una ampliación que hace posible contar con una ...

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El centro cultural Okendo de San Sebastián se reincorporará el próximo mes de marzo a la actividad cultural y social de la ciudad. Volverá a abrir sus puertas al público tras dos años de obras de ampliación y con cinco meses de retraso respecto a la fecha inicialmente prevista.

Ubicado en el barrio donostiarra de Gros, el centro ha multiplicado por más de cuatro su superficie anterior: 600 metros cuadrados repartidos en las dos plantas de la casa de origen medieval en la que nació el almirante Okendo. A este espacio ha sumado 2.000 metros, una ampliación que hace posible contar con una sala de exposiciones de 233 metros cuadrados, la más grande de las salas de las casas de cultura de San Sebastián, que permitirá al centro impulsar su trayectoria expositiva. El salón de actos tiene 211 metros, la biblioteca de adultos absorbe 411, mientras que la infantil ocupa otros 300, de los que 50 se han reservado para bebés.

Para inaugurar y presentar en sociedad las nuevas instalaciones de Okendo, que han requerido una inversión de 520.000 euros, la concejalía donostiarra de Cultura ha organizado unas jornadas de puertas abiertas los próximos 28 y 29 de febrero. Y ha elegido la muestra Gros en el arte para estrenar la sala de exposiciones, donde, en mayo, tomará el relevo una exhibición de fotografías de los fondos de la Fundación Ordóñez-Falcón.

A partir de marzo, el centro retomará su actividad ordinaria, que incluye un programa de 20 cursillos, en euskera y castellano, que acercarán a los alumnos a la creación literaria, la pintura al óleo, el ajedrez, la fabricación de perfumes o la espagiria, nombre que se da al arte de crear medicamentos a través de técnicas alquímicas. No faltan ofertas aún más relajantes, como reflexoterapia o feng-shui, una disciplina oriental que busca la armonía a través del ordenamiento de las energías.

El plazo de inscripción a los cursos se abre mañana lunes y se extiende hasta el día 20. La matrícula se puede formalizar en cualquier centro de Donostia Kultura de 17.00 a 20.00. El precio de las clases oscila entre los nueve y los 60 euros.

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