El Ayuntamiento de Cádiz permitió que una asociación usara el cuartel donde murió un joven por un derrumbe
El Ayuntamiento de Cádiz, gobernado por el PP, permitió que la Asociación de Ayuda al Necesitado Elencrys usara uno de los locales de la antigua academia de artillería, donde se produjo el derrumbe en el que falleció el pasado 16 de enero Manuel Gallardo Selma, de 15 años, y resultaron heridos otros dos menores. La asociación desarrolló su actividad en estas instalaciones desde abril hasta octubre de 2003, tres meses después de que la comisión de gobierno acordase el desalojo de esta zona por un informe de la Policía Local que alertaba de la presencia de grupos en una zona, "a simple vista, en...
El Ayuntamiento de Cádiz, gobernado por el PP, permitió que la Asociación de Ayuda al Necesitado Elencrys usara uno de los locales de la antigua academia de artillería, donde se produjo el derrumbe en el que falleció el pasado 16 de enero Manuel Gallardo Selma, de 15 años, y resultaron heridos otros dos menores. La asociación desarrolló su actividad en estas instalaciones desde abril hasta octubre de 2003, tres meses después de que la comisión de gobierno acordase el desalojo de esta zona por un informe de la Policía Local que alertaba de la presencia de grupos en una zona, "a simple vista, en estado de abandono y en malas condiciones de conservación".
La presidenta de Elencrys, Josefa García Díaz, aseguró ayer que no recibieron ninguna orden de desalojo y que dejaron el local por voluntad propia, ante el "estado de ruina y abandono" de estos antiguos cuarteles militares, de propiedad municipal.
La alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, y los concejales populares Francisco Vivas y Ana Peral acudieron incluso el 27 de abril del año pasado al acto de inauguración de este local. "Tenían constancia y conocimiento de que estábamos aquí porque vinieron a la inauguración", explicó García, quien detalló que durante todo el tiempo que permanecieron en la antigua academia de artillería no hubo "ni mantenimiento ni vigilancia municipal".
García insistió en que no recibieron ningún requerimiento de desalojo. "No, no, nada. En ningún momento. Nos fuimos porque aquello es la boca del lobo. Cada vez había más acumulación de basura, no había luces y una chirigota se metió en nuestro local", explicó García.
Esta declaración contrasta con la efectuada por Teófila Martínez el pasado lunes, cuando informó de que el Ayuntamiento de Cádiz ha cumplido con todas las decisiones acordadas en la comisión de gobierno del pasado 25 de julio, entre las que se incluía el desalojo de la zona. "Ninguna de las cuestiones de las que nos dotamos en comisión de gobierno se han dejado de hacer: los requerimientos, el proyecto de demolición y el cerramiento estaba hecho ya. No hay nada más que decir sobre eso", dijo Martínez.
El portavoz municipal del PSOE, Rafael Román, sostuvo ayer que la "irresponsabilidad, temeridad, imprudencia y negligencia aumenta a cada día que pasa". "Este nuevo episodio demuestra que todo lo que se dice de que aquello era un lugar abandonado cae por su peso. Era un lugar que estaba en uso, pero abandonado por el Ayuntamiento, no por los ciudadanos que iban en masa a aquel lugar", afirmó. Román acusó al PP de "no mantener ni conservar" esta zona, pese al "uso público y oficial" de aquellos locales. "La tragedia pudo ser aún mayor por la presencia de numerosas personas", dijo.