RADIOGRAFÍA DE LAS CARRETERAS DE ACCESO A LA CAPITAL / 1

El frenazo de las 8.15

El Real Madrid líder en la liga, el PP y el PSOE a la greña y decenas de inmigrantes detenidos por no irse de copas con la documentación a cuestas. Las noticias de la radio no son hoy distintas a las de cualquier otro lunes. Fuera, sobre la calzada de la A-6, tampoco hay diferencias: coches, prisas, frenazos y caras de resignación.

Son las 7.51 e incorporarse a la carretera de A Coruña desde Las Rozas es entrar en un desfile incesante de cohes que circulan a buen ritmo, aunque cada vez más lentos. A 17 kilómetros de la Puerta del Sol, es difícil circular a más de 80 kilómetros po...

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El Real Madrid líder en la liga, el PP y el PSOE a la greña y decenas de inmigrantes detenidos por no irse de copas con la documentación a cuestas. Las noticias de la radio no son hoy distintas a las de cualquier otro lunes. Fuera, sobre la calzada de la A-6, tampoco hay diferencias: coches, prisas, frenazos y caras de resignación.

Son las 7.51 e incorporarse a la carretera de A Coruña desde Las Rozas es entrar en un desfile incesante de cohes que circulan a buen ritmo, aunque cada vez más lentos. A 17 kilómetros de la Puerta del Sol, es difícil circular a más de 80 kilómetros por hora.

Todo empeora a partir del kilómetro 15. El nudo de la M-40 está cerca y cada vez se ven más coches. La velocidad baja hasta los 50 kilómetros/hora y, a partir del 13, las paradas son intermitentes. Superado el nudo, la circulación se torna más ágil durante un par de kilómetros que, a casi 80 por hora, se recorren en dos minutos.

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A partir del kilómetro 9, todo va a peor. Es imposible tardar menos de cuatro minutos en recorrer un kilómetro. Parada, arrancar el vehículo, poner segunda marcha y circular 200 o 300 metros a 30 kilómetros por hora. Nuevo frenazo hasta detener el coche. Un ciclo que se repite incesante. La incorporación de coches desde el carril bus-VAO parece tener la culpa. Pero, unos metros más allá, el problema se repite. El Palacio de la Moncloa, las universidades... Da tiempo a mirarlo todo con atención.

Las luces del faro de la Moncloa se ven cercanas. Pero el ritmo de circulación exaspera. Lo peor es la llegada al intercambiador de Moncloa. Autobuses, peatones, bocinazos... Son las 8.22 y, como en cualquier día laborable en la A-6, el conductor anhela llegar a su oficina. Desde aquí, el lugar de trabajo es un oasis de paz y tranquilidad.

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