INICIATIVAS

Un pueblo de Huesca 'trasvasa' ADSL desde Lérida

Tras 18 meses esperando a Telefónica, los vecinos crean Altorricón sin Cables

Altorricón, un pueblo oscense de 1.500 habitantes, figura entre las zonas de desierto ADSL en España. Solicitaron la banda ancha a Telefónica, pero no recibieron respuesta. Tras esperar más de año y medio, decidieron contratar las líneas en Almacelles (Lérida) y montar unas antenas para llevar el ADSL a su pueblo.

"En mayo, como ya teníamos financiación, buscamos una localidad vecina con cobertura ADSL donde pudiéramos contratar las líneas y luego llevarlas a Altorricón vía Wi-Fi", explica Héctor Dalmau, de 30 años, informático del Ayuntamiento.

El siguiente paso era contratar la...

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Altorricón, un pueblo oscense de 1.500 habitantes, figura entre las zonas de desierto ADSL en España. Solicitaron la banda ancha a Telefónica, pero no recibieron respuesta. Tras esperar más de año y medio, decidieron contratar las líneas en Almacelles (Lérida) y montar unas antenas para llevar el ADSL a su pueblo.

"En mayo, como ya teníamos financiación, buscamos una localidad vecina con cobertura ADSL donde pudiéramos contratar las líneas y luego llevarlas a Altorricón vía Wi-Fi", explica Héctor Dalmau, de 30 años, informático del Ayuntamiento.

El siguiente paso era contratar las líneas. "Creamos una asociación, Altorricón sin cables, para contratar ADSL. Solicitamos primero una de 2 megas para instalarla en una cooperativa de fruta en Almacelles. En Telefónica no lo tenían muy claro. Les extrañaba que una asociación si ánimo de lucro de Altorricón, que ni siquiera tenía teléfono, solicitara una línea. Nos la denegaron tres veces. Cuando logramos que instalaran la primera, solicitamos dos líneas más y ya no hubo problemas".

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La antena emisora de Almacelles dista 7,5 kilómetros de la receptora, en Altorricón. La última sirve también para distribuir por el pueblo la conexión a Internet sin cables. La instalación costó 18.000 euros.

De momento, y hasta que lleguen más antenas, cinco usuarios disfrutan de una conexión de 256 Kbps. En la asociación figuran 62 personas y empresas más que están dispuestas a pagar 300 euros por la instalación y 18 euros de cuota mensual.

Dalmau cree que en el futuro la Red inalámbrica les proporcionará nuevas posibilidades. "La cobertura actual es de unos 4,5 kilómetros. En la zona hay algunos teléfonos rurales (TRAC) a los que podemos dar un acceso de calidad a la Red; además, estudiamos la posibilidad de facilitar la Telefonía IP, sin coste de llamada para los usuarios. También hemos hecho pruebas de vigilancia y control remoto, por ejemplo, de las granjas".

El informático de Altorricón, Héctor Dalmau.F. G.

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