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Olvidar el 'expediente X'

Sin hallar explicaciones a su derrota en Pamplona, el Depor recibe a un PSV acuciado

Todo el capital acumulado tras siete partidos se vino abajo en cuatro minutos. Desde que comenzó la temporada, a mediados de agosto, con la fase previa de la Liga de Campeones, el Deportivo presentaba una tarjeta irreprochable: cinco victorias, dos empates y sólo tres goles encajados. Pero cuatro minutos en El Sadar, tras un sainete de penaltis absurdos y cantadas varias, bastaron para que Osasuna fuese capaz de endosarle tantos goles como había recibido en los siete choques anteriores. La perplejidad por los extrañísimos sucesos de Pamplona -"un expediente X", lo definió Luque - no hab...

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Todo el capital acumulado tras siete partidos se vino abajo en cuatro minutos. Desde que comenzó la temporada, a mediados de agosto, con la fase previa de la Liga de Campeones, el Deportivo presentaba una tarjeta irreprochable: cinco victorias, dos empates y sólo tres goles encajados. Pero cuatro minutos en El Sadar, tras un sainete de penaltis absurdos y cantadas varias, bastaron para que Osasuna fuese capaz de endosarle tantos goles como había recibido en los siete choques anteriores. La perplejidad por los extrañísimos sucesos de Pamplona -"un expediente X", lo definió Luque - no había desaparecido ayer en A Coruña, en vísperas del retorno a la Copa de Europa ante el PSV Eindhoven.

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Los cuatro delirantes minutos de El Sadar se cobraron una víctima. El lateral derecho Héctor desapareció de la convocatoria para jugar contra el PSV, y aunque Irureta asegurase que sólo pretende darle descanso, resulta difícil desvincular esa decisión de la desafortunada tarde del jugador en Pamplona, donde cometió un penalti por un error de cálculo y tres minutos después anotó en propia meta. Las secuelas del viaje a Navarra también dejarán fuera al lateral izquierdo Romero, protagonista de otra historia digna de un serial parapsicológico. La inflamación provocada por la picadura de una víbora no ha remitido del todo, y aunque ayer se entrenó con el vendaje que le cubre el brazo dañado, Irureta decidió prescindir de él.

La gran duda es si Irureta seguirá encomendando el ataque a Pandiani, que mantiene su ritmo de un gol por partido, o dará la alternativa a Tristán, más ansioso y humilde que nunca. En Pamplona, el delantero sevillano entró en el equipo al comienzo de la segunda parte y dejó atónitos a los que le siguen habitualmente. Aprovechó el descanso para hacer calentamiento marcándose unos sprints a lo ancho del terreno con una furia desconocida en él.

El Deportivo se va a encontrar con un rival acuciado por las urgencias. El PSV, que dirige Guus Hiddink, se estrenó en el grupo con una derrota ante el Mónaco que evocó su fracaso de la temporada anterior, cuando no pasó de la primera fase. "El equipo viene muy presionado", asegura Bruggink, punta del Mallorca que el curso pasado jugaba en el PSV. "En los dos últimos años no hubo buenos resultados en Europa, la gente no se conforma con ganar la Liga y exige por lo menos pasar a la segunda fase. Ahora no tienen nada que perder e irán a por todo". A Irureta le preguntaron ayer si no preferiría un rival menos urgido, y se puso irónico: "De preferir, preferiría ser el sultán de Brunei".

Deportivo: Molina; Manuel Pablo, Andrade, Naybet, Capdevila; Sergio, Mauro Silva; Víctor, Valerón, Luque; y Pandiani o Tristán.

PSV Eindhoven: Waterreus; Bruma, Ooijer, Colin, Young Pyo Lee; Robben, Rommedhal, Vogel, Van Bommel; Kezman y Vannegoor of Hesselink.

Guus Hiddink, técnico del PSV Eindoven, en el entrenamiento ayer de su equipo en Riazor.EFE

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