Trichet logra el apoyo de la Eurocámara para presidir el Banco Central

Jean-Claude Trichet, gobernador del Banco de Francia, logró ayer el respaldo inicial de la Eurocámara para ser presidente del Banco Central Europeo tras defender el Pacto de Estabilidad. Por 20 votos a favor, dos en contra (un francés y un griego) y cuatro abstenciones (de los británicos), la Comisión de Asuntos Económicos dio la luz verde una vez que Trichet dijo que un déficit por encima del 3% del PIB, como ocurre en Francia y Alemania, "tiene efectos perversos" para el crecimiento y el empleo.

"Alentamos a que se cumpla como estipula el texto", contestó Trichet a una de las decenas ...

Jean-Claude Trichet, gobernador del Banco de Francia, logró ayer el respaldo inicial de la Eurocámara para ser presidente del Banco Central Europeo tras defender el Pacto de Estabilidad. Por 20 votos a favor, dos en contra (un francés y un griego) y cuatro abstenciones (de los británicos), la Comisión de Asuntos Económicos dio la luz verde una vez que Trichet dijo que un déficit por encima del 3% del PIB, como ocurre en Francia y Alemania, "tiene efectos perversos" para el crecimiento y el empleo.

"Alentamos a que se cumpla como estipula el texto", contestó Trichet a una de las decenas de preguntas que le plantearon los eurodiputados en relación con el Pacto de Estabilidad antes de emitir su voto. "Más allá de ciertos límites de déficit y de gasto en relación con el PIB estaríamos estrangulando el crecimiento y el empleo", insistió al comentar si había que mantener o modificar el sagrado límite del 3% de déficit que fija el Pacto. Recordó que ese umbral quedó establecido tras realizar numerosos análisis técnicos y que, de hecho, en Francia se aplicó como regla a nivel nacional desde los años ochenta "para no lastrar excesivamente a las futuras generaciones".

Es, precisamente ahora, Francia el país con mayor déficit en la UE (3,1% del PIB el año pasado y 4% previsto para este año). Trichet, que insistió en que no estaba en esa comparecencia como "candidato francés", aseguró, en clara referencia a París y Berlín, que "algunas economías están pagando muy caro" el tener unos gastos públicos muy elevados porque lo que ganan con ello es muy inferior a lo que pierden por tener déficit excesivos. "Si soy presidente del BCE, diré lo mismo que he dicho aquí", tranquilizó a los eurodiputados, que le recordaron su procedencia de un país que incumple los compromisos del Pacto.

Preguntas

Previamente a la comparecencia, Trichet había enviado a la Comisión de Asuntos Económicos las respuestas a un cuestionario de 33 preguntas, varias de ellas también relacionadas con el Pacto. "El Pacto se halla especialmente concebido para garantizar que la UEM no tenga desequilibrios", respondió en una de ellas en términos similares a sus comentarios de ayer. "Considero que el Pacto es un elemento importante de la construcción de la UEM. Ningún Gobierno del que yo tenga conocimiento ha solicitado ningún tipo de modificación del texto, algo que me complace enormemente, ya que considero que su modificación, en concreto el límite del 3% del PIB, podría resultar peligrosa para la credibilidad de la UEM en su conjunto". Trichet, que se definió como "moderado liberal", aseguró que mantendrá la línea de trabajo del todavía presidente del BCE, el holandés Wim Duisenberg, quien el día anterior también hizo una encendida defensa del Pacto.

Ahora, la candidatura de Trichet será votada el próximo día 25 en el pleno, aunque no tendrá problema alguno a la vista de la votación de ayer. En el hipotético caso de que el voto fuera negativo, y aunque no es vinculante, el Parlamento pediría al Consejo de la UE que propusiera otro candidato. Si la votación es positiva, los jefes de Estado y Gobierno nombrarán nuevo presidente del BCE a Trichet el mes que viene. La agria polémica sobre el Pacto de Estabilidad fue igualmente atizada ayer por el Gobierno holandés, que amenazó a la Comisión con llevarla al Tribunal de Justicia si no emprende sanciones contra Alemania y Francia una vez que registrarán por segundo ejercicio consecutivo unos déficit de más del 3% del PIB.