Los vecinos exigen a las autoridades que pongan fin a las agresiones en dos barrios de Sabadell

Violencia gratuita. Es lo que, según los vecinos de Torreguitart, vienen padeciendo este barrio y el de la Concordia, en el norte de Sabadell, desde hace seis años. Y exigen que se acabe. Son agresiones indiscriminadas, hay semanas en las que hay que lamentar "dos palizas y otras semanas en las que no hacen nada, atacan cuando les apetece", explica Julia García, de la asociación de vecinos. La junta de seguridad local incrementará la colaboración entre los cuerpos policiales. la policía reconoce que de momento no hay detenidos, pese a que los vecinos han identificado a los agresores-

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Violencia gratuita. Es lo que, según los vecinos de Torreguitart, vienen padeciendo este barrio y el de la Concordia, en el norte de Sabadell, desde hace seis años. Y exigen que se acabe. Son agresiones indiscriminadas, hay semanas en las que hay que lamentar "dos palizas y otras semanas en las que no hacen nada, atacan cuando les apetece", explica Julia García, de la asociación de vecinos. La junta de seguridad local incrementará la colaboración entre los cuerpos policiales. la policía reconoce que de momento no hay detenidos, pese a que los vecinos han identificado a los agresores-

Hace poco más de una semana fueron 10 cortes en el trasero de un joven, poco después una paliza a un muchacho negro. "Dos semanas antes a mi hijo le pegaron una paliza y le rajaron la oreja, tuvieron que darle cuatro puntos", explica Julia. Las agresiones se producen casi siempre sin mediar palabra. Al hijo de Julia le pegaron porque alguien presumió ante él de una cruz gamada en el antebrazo y él respondió enseñando otra cruz gamada, pero pisoteada. Al cabo de una semana llegó la revancha: apalearon al joven.

Ayer, se reunió el consejo local de seguridad, con la asistencia de vecinos y del mismo alcalde de Sabadell, Manuel Bustos. A la salida, Bustos insistió en que se trata de "hechos aislados" y añadió que en muchos casos "los agresores no son de Sabadell" y que la "policía ha aclarado todos los casos denunciados" (el joven que recibió los navajazos en el trasero no lo denunció).

Respecto a las medidas tomadas, Bustos aseguró que los vecinos "ya conocen toda la coordinación policial" que se está llevando a cabo y que "están satisfechos".

Pero los vecinos insisten en que llevan seis años sintiéndose acosados por estos chavales. Son jóvenes de estética nazi: cruces gamadas, botas altas y pelo rapado. Cuando se reúnen pueden llegar a ser una veintena y van "creciendo", según Julia.

Patada en la cara

"La plaza de Espanya es nuestra, nos pasamos 15 años reivindicándola para que ahora la tomen estos chavales", afirma. "Para combatir este tipo de agresiones, desde hace dos años este barrio celebra la fiesta de la diversidad, en la plaza de Espanya. En la última, uno de estos jóvenes le dio una patada en la cara a un chico y se marchó corriendo".

Pero ¿quiénes son estos muchachos? "A veces veo jóvenes de estos con la cruz gamada que hace cuatro días veía yendo con su padre a una manifestación de izquierdas", explica Julia. Tienen entre 14 y 18 años, la mayoría, aunque algunos están camino de los 30. Y todos hacen gala de un comportamiento agresivo. Algunos son del barrio, otros vienen de las vecinas poblaciones de Terrassa, Cerdanyola o Castellar. "Sabemos quiénes son y dónde se reúnen", asegura Julia

"La historia empezó con gente inmigrante. Después, cuando se encontraron con que mucha gente el barrio defendía a estos inmigrante, atacaban a esta gente, y ahora les da igual", asegura un vecino.

"Tenemos que ir con mil ojos, hay que denunciar lo que pasa, aunque de poco sirve, porque les ponen una multa y ya está", reflexiona esta vecina. "Tras seis años sintiéndonos acechados, ahora que la policía también les aceche a ellos, que se sientan vigilados", concluye Julia.

La junta de seguriad local, que agrupa a todos los cuerpos policiales, celebró ayer una reunión en la que se tomó la decisión de incrementar la colaboración. El Cuerp Nacional de Policía reconoció que no se ha producido detención alguna, pese a que los vecinos aseguran conocer perfectamente a los autores de las agresiones.

El alcalde recordó que la falta de agentes de policía es una de las reivindicaciones de buena parte de los municipios del área metropolitana. El despliegue de los Mossos d'Esquadra está previsto para el año 2006 y mientras se ha ido reduciendo el número de policías. La consejera de Justicia, Núria de Gispert, se reunió ayer con el alcalde de Sabadell para tratar de las agresiones y le anunció su intención de lograr que se cubra el 90% de las bajas de la policía que se han producido en los últimos tiempos.

Manuel Bustos insistió ayer en el carácter dominantemente pacífico de Sabadell y en el sentido de la convivencia de la mayoría de sus ciudadanos. "La seguridad y la tolerancia son dos características de la ciudad y queremos que lo sigan siendo", dijo.