Tráfico detectará desde vehículos a conductores que hablen por el móvil

Conversar por teléfono al volante multiplica el riesgo de accidente

Los conductores que usen el teléfono móvil al volante, una costumbre tan extendida como prohibida -acarrea una multa de 91 euros-, son objeto desde ayer de una campaña de vigilancia. Tráfico pretende con ella concienciar a los automovilistas de que conducir con el móvil en la mano multiplica por seis el riesgo de un accidente. La Guardia Civil utilizará sus coches camuflados para sorprender a los infractores.

El uso del móvil -ya hay más móviles que automóviles- está prohibido en la conducción desde la última Ley de Seguridad Vial, salvo que se utilicen sistemas sin manos ni auri...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Los conductores que usen el teléfono móvil al volante, una costumbre tan extendida como prohibida -acarrea una multa de 91 euros-, son objeto desde ayer de una campaña de vigilancia. Tráfico pretende con ella concienciar a los automovilistas de que conducir con el móvil en la mano multiplica por seis el riesgo de un accidente. La Guardia Civil utilizará sus coches camuflados para sorprender a los infractores.

El uso del móvil -ya hay más móviles que automóviles- está prohibido en la conducción desde la última Ley de Seguridad Vial, salvo que se utilicen sistemas sin manos ni auricular. La prohibición es conocida por los conductores, pero cualquiera puede ver en las carreteras o calles españolas que, en general, se hace caso omiso de ella. Un estudio presentado ayer por Carlos Muñoz-Repiso, máximo responsable de la Dirección General de Tráfico (DGT), lo demuestra.

El estudio, elaborado entre el 19 y el 23 de mayo mediante una encuesta a 1.800 conductores, revela que el 88,3% lleva el móvil encima mientras conduce y que el 63,7% de ellos portaba el teléfono manual encendido. De éstos, el 51,8% había recibido o realizado "al menos una llamada", aunque hubo un 2,8% que reconoció que, en las 24 horas anteriores a la encuesta, había efectuado más de 16 llamadas al volante.

Las investigaciones efectuadas hasta ahora sobre los riesgos de hablar por teléfono mientras se conduce -sobre todo cuando se utiliza una mano para sujetar el aparato- concluyen "que lo que más absorbe en la conducción son la toma de decisiones y el mantener una conversación, aunque sea con dispositivos sin manos", según Muñoz Repiso.

"Son conductas que retrasan las reacciones de los conductores de forma equivalente a quienes llevan entre 0,5 y 0,8 gramos de alcohol por litro de sangre", agregó el general jefe de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, Alfonso Ferrer. Tráfico asegura que el uso del móvil "multiplica por seis el riesgo de provocar un accidente". De hecho, el 10% de los encuestados por Tráfico admite haber tenido "al menos un incidente" de conducción mientras usaba el móvil, sobre todo desviaciones de trayectoria, maniobras antirreglamentarias y colisiones.

A la vista de estos datos, Tráfico ha lanzado una campaña para disuadir del uso del móvil al volante. La primera medida empezó ayer y se prolongará hasta el 29 de junio: se vigilará mediante vehículos camuflados (de la Guardia Civil, pero también de la Ertzaintza y de los Mossos d'Esquadra) el uso del móvil en carretera y se "realizará un control sobre al menos 100.000 conductores para determinar el porcentaje de utilización del teléfono mientras se conduce". En esta fase también colaborarán las policías locales de municipios de más de 25.000 habitantes. Cuando concluya la campaña, apoyada con anuncios en prensa, radio y televisión, se hará un informe sobre los resultados. Y del 30 de junio al 4 de julio se hará otra encuesta sobre la efectividad de la campaña "mediante la observación directa en carretera y ciudad". Con multa.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Sobre la firma

Archivado En