Análisis:BOLSAS

Cuarto máximo consecutivo

La Bolsa española continúa marcando máximos anuales, aunque los argumentos que utilizan los inversores son casi todos ajenos.

En esta última sesión los inversores españoles apostaron decididamente por retirar beneficios y concederse una tregua, pero el tirón de Wall Street en la apertura no les concedió ese margen de maniobra que querían. Las leves pérdidas de la mañana se transformaron en ganancias y los índices terminaron la sesión con nuevos máximos.

El Ibex 35 ganó el 1,51% para cerrar en 6.960,90 puntos, mientras que el índice general de la Bolsa de Madrid subió el 1,31% y t...

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La Bolsa española continúa marcando máximos anuales, aunque los argumentos que utilizan los inversores son casi todos ajenos.

En esta última sesión los inversores españoles apostaron decididamente por retirar beneficios y concederse una tregua, pero el tirón de Wall Street en la apertura no les concedió ese margen de maniobra que querían. Las leves pérdidas de la mañana se transformaron en ganancias y los índices terminaron la sesión con nuevos máximos.

El Ibex 35 ganó el 1,51% para cerrar en 6.960,90 puntos, mientras que el índice general de la Bolsa de Madrid subió el 1,31% y terminaba la sesión en 725,63.

La situación económica en Europa no es la más idónea para arriesgar dinero en renta variable a corto plazo, pero la mayoría de los analistas insisten en que la percepción de riesgos ha descendido radicalmente y, aunque los volúmenes negociados sólo muestran actividad diaria, los inversores empiezan a contagiarse de esa relativa confianza.

El problema que plantea esta situación es el desfase entre la altura de las cotizaciones y la situación económica, aunque en realidad lo que se está valorando es la posible salida de la crisis económica en Estados Unidos y su capacidad de influencia en Europa.

Si los mercados de valores europeos fueron incapaces de superar la retirada de beneficios de esta jornada, la apertura de Wall Street supuso un cambio total de dirección.

La Bolsa estadounidense abrió con una fuerte subida debida a la mejora en las recomendaciones de varias empresas por parte de algunas casas de análisis y el incremento de la producción manufacturera en el Estado de Nueva York muy por encima de las previsiones de los analistas. A media sesión el índice Dow Jones de valores industriales ganaba el 1,62% y superaba los 9.250 puntos. Ese avance del mercado estadounidense fue la única razón para las ganancias en las bolsas europeas, entre las que destacaban París y Francfort con subidas del 2,11% y 3,02%, respectivamente.

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