Socialistas
El luto ya no se lleva, por la idea de que el dolor familiar no paga un tinte, frívolo aun de negro; pero se lo puso Zapatero en el funeral de las víctimas militares de lo que sea (accidente, acto de servicio), tan desmesurado (en relación con otras tragedias) como significativo. Allá ellos: es un acto patriótico -Rey y Príncipe de uniforme, Reina con lágrimas, banderas sobre los crucifijos de los féretros, salvas, obispos- algo rebatido que las televisiones y las primeras páginas nos muestran. Los familiares no iban de luto. El dolor es otra cosa, desde la apatía hasta la histeria.
El...
El luto ya no se lleva, por la idea de que el dolor familiar no paga un tinte, frívolo aun de negro; pero se lo puso Zapatero en el funeral de las víctimas militares de lo que sea (accidente, acto de servicio), tan desmesurado (en relación con otras tragedias) como significativo. Allá ellos: es un acto patriótico -Rey y Príncipe de uniforme, Reina con lágrimas, banderas sobre los crucifijos de los féretros, salvas, obispos- algo rebatido que las televisiones y las primeras páginas nos muestran. Los familiares no iban de luto. El dolor es otra cosa, desde la apatía hasta la histeria.
Ellos son así, pero ¿y Zapatero? No ya su luto, que llevó al Congreso, sino su pésame a Aznar: que le aplaudió notablemente agradecido, mientras la izquierda no lo hacía. ¿Quién representa en el Congreso a las familias que acusan de imprevisión, de avaricia, de desprecio a las autoridades? ¿Quién representa a estos ciudadanos muertos para decir que no debemos ser invasores ni participar en guerras? ¿Quién le dice que no al obispo castrense que insistía en que se han sacrificado por llevar la paz a otros? Quizá IU, para ser acusada de comunista -claro- por el Gobierno, y a la que recordaban en una radio los millones de crímenes que cuenta el Libro Negro -una elaboración- para culpar a Llamazares. Ayer un neofascista le acusaba también de haber dicho "No pasarán", por "resucitar la guerra civil".
Pero ¿y los socialistas? O sea, ¿y Zapatero? Ni él ni sus próximos han sabido aprovechar las manifestaciones; no han creído en ellas. No creen, estos que dirigen el partido, en el "No a la guerra": lo hubieran exclamado en el Congreso, se lo hubieran arrojado a la cara a Aznar y a todos los suyos. Les hubieran pedido investigación: no sólo de lo que pasó, sino de qué hacíamos allá. No a los soldados españoles en el extranjero, no a los funcionarios ocupantes de Irak. Pero es que no somos ocupantes: no es políticamente correcto. Sharon habló de la ocupación de Palestina y se le echaron encima los más duros, los religiosos: están liberando sus propios territorios bíblicos. Bush libera a Irak de Sadam y Afganistán de los talibanes. ¿Y nosotros, qué hacemos? ¿Es el Ejército un hacedor de paz? ¿Nuestros aviones Hércules sólo sirven para traer cadáveres? ¿Viste más el uniforme que la pancarta? ¿Se suman los socialistas a la España aparencial de la televisión y la foto de primera?