España se ha ahorrado más de 500 millones en crudo por la apreciación del euro

La factura energética de España en el primer trimestre de este año ha sido 519 millones de euros más baja gracias al fortalecimiento de la moneda única frente al dólar. El precio del barril entre enero y marzo fue de media de unos 30 dólares, 10 más que en el mismo periodo del año pasado. Si el euro se hubiese mantenido débil, como a principios de 2002, la factura energética le habría costado a España 1.070 millones más este año. El barril de brent subió ayer cerca de un 2%, hasta los 25,10 dólares, tras admitir la OPEP que estudiará en junio otro recorte de la producción.

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La factura energética de España en el primer trimestre de este año ha sido 519 millones de euros más baja gracias al fortalecimiento de la moneda única frente al dólar. El precio del barril entre enero y marzo fue de media de unos 30 dólares, 10 más que en el mismo periodo del año pasado. Si el euro se hubiese mantenido débil, como a principios de 2002, la factura energética le habría costado a España 1.070 millones más este año. El barril de brent subió ayer cerca de un 2%, hasta los 25,10 dólares, tras admitir la OPEP que estudiará en junio otro recorte de la producción.

España se ha ahorrado 519 millones gracias a la apreciación del euro. Debido a que la moneda única europea se revalorizó de media un 22% frente al dólar en el primer trimestre, la cuenta sólo ha salido la mitad más cara, 551 millones.

Lo que ha sucedido en los primeros tres meses, según fuentes del sector petrolero, será aún más positivo para España en el segundo trimestre, puesto que en lo que va de éste, el euro ha seguido fortaleciéndose mientras que la cotización del crudo ha descendido tras el fin de la guerra. El hecho es novedoso para España, puesto que nunca había podido sacar ventaja de poseer un moneda más fuerte que el dólar para comprar crudo y derivados del petróleo.

La cuenta es simple. España refina unos 107 millones de barriles de crudo cada trimestre (428 al año) y comprar esta cantidad entre enero y marzo de 2002 le costó, de media, 2.140 millones de dólares (20 dólares cada barril). Como entonces el euro cotizaba a 0,877 dólares, la cuenta final, en euros, fue de 2.440 millones.

Entre enero y marzo de este año, España pagó por otros 107 millones de barriles 3.210 millones de dólares debido a que la guerra de Irak elevó el precio del crudo a 30 dólares por barril. Si el euro hubiese mantenido la misma cotización de hace un año, la factura hubiese sido 1.070 millones de dólares más cara. No obstante, la moneda europea se revalorizó el 22%, a una media de 1,073 dólares en los primeros tres meses, por lo que la factura final, sólo se encareció 551 millones euros, la mitad de lo que aumentó en dólares.

La situación para un importador neto de crudo como España ha sido la óptima en los primeros tres meses, puesto que gracias a la evolución del euro la factura energética ha sido menor y la presión sobre la inflación también. No obstante, el efecto de la escalada del euro sobre los precios que paga el consumidor de gasolina todavía no se notan. Hasta ahora, una moneda única más fuerte ha servido, al menos, para frenar la subida de los precios. A finales de marzo, el litro de la gasolina sin plomo costaba 88 céntimos de euro, según los últimos datos oficiales del Ministerio de Economía. En la lista más actualizada de la misma fuente, la de la última semana, situaba el precio de la sin plomo en el mismo nivel que a finales del primer trimestre. En el caso del gasóleo, el litro costaba 78,8 céntimos a finales de marzo y hace una semana había bajado a 77,9, según Economía. No obstante, el descenso se ha debido más al efecto estacional (en verano se consume menos gasóleo) que al impacto del alza del euro. Las distintas fuentes del sector consultadas coinciden en que el usuario notará el alza del euro y la caída del crudo una vez que pase el puente de San Isidro, puesto que entre éste, la Semana Santa y el puente de mayo, la demanda se ha mantenido muy alta y casi sin interrupciones. Una vez que pasen estos tirones, la situación se moderará y, si el euro sigue apreciándose frente a la divisa estadounidense y el precio del barril cayendo, los precios de los carburantes sin duda bajarán. Precios del crudo

El euro llegó a cotizar ayer a 1,1536 dólares, su precio más alto desde el 4 de enero de 1999, y las perspectivas, según varios analistas como los de Merrill Lynch, es que alcance los 1,20 o incluso 1,25 dólares a finales de año. El barril de crudo, en cambio, registró ayer su tercera jornada al alza, mientras responsables de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) admitieron que están estudiando aprobar un nuevo recorte de la producción -el segundo de este año- en una reunión del cartel prevista para junio próximo.

El mes pasado la OPEP ya aprobó una reducción de la producción de dos millones de barriles diarios, que será efectiva a partir del 1 de junio. Las subidas del petróleo desde que comenzó la semana han sido muy ligeras, el barril brent ha pasado de 23,40 a 25,10 dólares. Este último precio está casi cuatro dólares por debajo del registrado, de media, en lo que va de año. El incremento del crudo se atribuye a las dudas sobre la recuperación de la producción de crudo iraquí.