Crítica:LIBROS

Para una exploración

Pedro Ugarte (Bilbao, 1963) mantiene dos tonos en su obra. Uno de ellos es de corte narrativo, centrado en un espacio real, cercano a su experiencia vital, en un espacio reconocible, que fácilmente se identifica con Bilbao. No falta en esta corriente un aspecto de crítica y sarcasmo, un fondo simbólico, pero la sensación realista de esta obra sobresale sobre otros aspectos de su creación y a ello se alude con un cierto poso de ironía en este volumen. Podría llamarse "galdosiano" si el expresionismo no hubiera dejado también su rastro en esa prosa.

El segundo tono es más alegórico, o si ...

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Pedro Ugarte (Bilbao, 1963) mantiene dos tonos en su obra. Uno de ellos es de corte narrativo, centrado en un espacio real, cercano a su experiencia vital, en un espacio reconocible, que fácilmente se identifica con Bilbao. No falta en esta corriente un aspecto de crítica y sarcasmo, un fondo simbólico, pero la sensación realista de esta obra sobresale sobre otros aspectos de su creación y a ello se alude con un cierto poso de ironía en este volumen. Podría llamarse "galdosiano" si el expresionismo no hubiera dejado también su rastro en esa prosa.

El segundo tono es más alegórico, o si se quiere metafórico. El espacio se representa por medio de cronotopos indeterminados, por figuras poco realistas, de forma que la representación alcanza una mayor tesitura moral. Ya no es la anécdota el centro del interés artístico, sino algo más profundo: una reflexión sobre la condición humana, sobre la condición personal, una metáfora animal, una mirada sobre la naturaleza humana, y el sentido de la vida.

Los microrrelatos reunidos en Materiales para una exploración corresponden a esta manera de contar. Se presentan como una enciclopedia de la mirada personal, una colección de apuntes, de cuentos breves, de destellos audaces, de recuerdos, de impresiones libres, de búsquedas de sentido, de notas autobiográficas.

Resulta evidente que la exploración a la que se refiere el título se concentra en la naturaleza humana: apuntes y observaciones de una forma de ser, para un tratado de creación personal.

Estos microrrelatos aparecen siempre con una voluntad de ser releídos, porque la brevedad que los acerca a los poemas necesita de un momento de reflexión, después de que la sorpresa haya atrapado al lector. Prefiero los textos cortos y los que recaban una atención en la lectura de una metáfora de la vida animal (Las águilas es un excelente ejemplo) como representación de la vida humana. Pero deben subrayarse también los relatos que representan una reflexión sobre el género y sobre el oficio de la escritura como formas de construcción de un mundo personal y de la creación de un estilo, abundando así en una de los corrientes claves de la escritura de microrrelatos.

Los temas que se tratan y los argumentos con los que se han enhebrado no pueden resumirse en esta reseña, pero hay un poco de todo. He apuntado mi preferencia por las métaforas de animales como espejo de comportamiento humano, pero pueden señalarse otros mundos de preferencia: la historia como una forma de mirar al presente, historia de dobles como creación metafórica de lo desconocido.

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Ugarte mantiene un tono circunspecto, pero prefiere jugar con la insatisfacción que produce la vida corriente, que con la ironía, que está presente, pero dominada por una mirada, más seria. Su estilo es personal, quizás algo envarado, con atención a los adjetivos antepuestos y a los tiempos verbales en imperfecto, que es un rasgo de estilo personal en busca de un lenguaje exacto.

Pedro Ugarte: Materiales para una exploración. Lengua de Trapo. Madrid. 2003, 220 páginas, 15,50 euros.

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