Huertas se cerrará a los coches con bolardos abatibles

El barrio de Las Letras (distrito Centro) ha sufrido en los últimos meses una profunda reforma cuyo máximo exponente es la conversión en peatonal de una de sus calles más emblemáticas: Huertas. Después de nueve meses de obras, a partir de abril esta vía quedará restringida al tráfico rodado. Tan sólo los vehículos de emergencia, los residentes que tengan que pasar a su garaje y los vehículos de carga y descarga podrán circular por Huertas gracias a unas tarjetas electrónicas que bajarán a distancia unos bolardos retráctiles que se colocarán en cada cruce de la calle.

Con la peatonalizac...

El barrio de Las Letras (distrito Centro) ha sufrido en los últimos meses una profunda reforma cuyo máximo exponente es la conversión en peatonal de una de sus calles más emblemáticas: Huertas. Después de nueve meses de obras, a partir de abril esta vía quedará restringida al tráfico rodado. Tan sólo los vehículos de emergencia, los residentes que tengan que pasar a su garaje y los vehículos de carga y descarga podrán circular por Huertas gracias a unas tarjetas electrónicas que bajarán a distancia unos bolardos retráctiles que se colocarán en cada cruce de la calle.

Con la peatonalización de las calle de Huertas, el Ayuntamiento pretende reservar para los viandantes toda la calzada desde el paseo del Prado hasta la plaza del Ángel. Así, el tráfico rodado quedará restringido por bolardos retráctiles, que ya se han colocado en todas las intersecciones entre la calle de Jesús y la plaza del Ángel.

Estos bolardos se mueven mediante un control remoto. Miden unos 40 centímetros de altura cuando están desplegados y son resistentes a fuertes impactos. "En cada cruce se ha colocado una columna de control. Los vecinos que dispongan de tarjeta [el control remoto] podrán bajar los bolardos para pasar con el vehículo en horarios determinados", explica Ángel Rodríguez, gerente de la Empresa Municipal de la Vivienda (EMV).

El Ayuntamiento aún no sabe cuántas personas tendrán acceso a estas tarjetas, pero sí quiénes: entre los afortunados se cuentan los servicios de emergencia, los comerciantes para la carga y descarga y los residentes que necesiten pasar con su coche al garaje.

El proyecto para rehabilitar Huertas fue aprobado hace casi un año por el Ayuntamiento con una inversión de 2,25 millones de euros, así como subvenciones de las tres administraciones (Gobierno central, regional y Consistorio) con el fin de reformar 2.722 viviendas susceptibles de ser rehabilitadas (el barrio tiene 4.949 inmuebles censados).

Proyecto ambicioso

"Es uno de los proyectos más ambiciosos de esta legislatura. Queremos que el peatón predomine sobre el coche y que la zona se convierta en un paseo bonito y cómodo y, culturalmente, muy rico", explica el concejal de Rehabilitación, Sigfrigo Herráez (PP). Las ayudas para la rehabilitación de las viviendas se pueden solicitar hasta 2005 y están destinadas al entorno comprendido entre la glorieta de Atocha, Jacinto Benavente, la plaza de Santa Ana y la calle del Prado.

Este programa de rehabilitación estipula que si los propietarios de las viviendas se deciden a reformar sus pisos, las tres administraciones reformarán gratuitamente la fachada del edificio. El Ayuntamiento es consciente de que el barrio de las Letras necesita una profunda reforma, ya que la mayoría de sus inmuebles superan los 100 años.

Según un estudio realizado por el Consistorio, más del 50% de los edificios necesita la rehabilitación y, además, las familias que las habitan en ellas disponen de unos ingresos anuales inferiores a 21.035 euros (3,5 millones de pesetas). Todavía, según los informes municipales, hay nueve viviendas sin agua corriente y 1.183 sin agua caliente. Los pisos que carecen de teléfono ascienden a 973 y los que no tienen calefacción, a 724. Existen 2.734 viviendas que cuentan con suministro de gas natural, mientras que otras 1.274 carecen de este servicio, dato que se está teniendo en cuenta en las obras de rehabilitación.

De momento, todas las atenciones se centran en terminar para el próximo abril la obra de peatonalización.

Pero las obras no son del gusto de todos los vecinos. Muchos critican que la peatonalización les haya restado casi 90 plazas de aparcamiento. Además, la Asociación de Vecinos Barrio de Las Letras denuncia que la calle se va a convertir ahora en un lugar para la práctica masiva del botellón. "Somos conscientes de los problemas de aparcamiento que ha generado la obra, pero la peatonalización de Huertas da prioridad al caminante sobre el vehículo. De todas formas, vamos a paliar la falta de huecos para aparcar con la cesión de una planta del aparcamiento de Santa Ana (100 plazas) para los residentes y con la construcción de un aparcamiento en la calle de la Alameda", responde Sigfrido Herráez.