Una sola empresa privada gestionará los servicios de tráfico en Vitoria
El Ayuntamiento de Vitoria contratará a una empresa privada para que coordine y gestione todos los servicios de tráfico de la ciudad durante los próximos cuatro años. En la actualidad, son cuatro las contratas que se encargan del mantenimiento y la gestión de los sistemas que regulan la circulación (como semáforos, cámaras, detectores del volumen de vehículos o paneles informativos) junto con un gabinete municipal de tráfico y los efectivos de la Policía Local. El Ayuntamiento se gasta 470.000 euros anuales en esas firmas.
La pretensión del alcalde, Alfonso Alonso, es firmar un contrato...
El Ayuntamiento de Vitoria contratará a una empresa privada para que coordine y gestione todos los servicios de tráfico de la ciudad durante los próximos cuatro años. En la actualidad, son cuatro las contratas que se encargan del mantenimiento y la gestión de los sistemas que regulan la circulación (como semáforos, cámaras, detectores del volumen de vehículos o paneles informativos) junto con un gabinete municipal de tráfico y los efectivos de la Policía Local. El Ayuntamiento se gasta 470.000 euros anuales en esas firmas.
La pretensión del alcalde, Alfonso Alonso, es firmar un contrato de cuatro años con una única empresa que gestione el futuro centro de control con un desembolso de 745.000 euros al año.
La recogida de información será una de las labores básicas de este centro. Deberá contar con 15 trabajadores y siete vehículos que centralizarán su actuación en un local situado junto a las instalaciones de la Policía Local. Allí se recibirán datos procedentes de los 200 contabilizadores de volumen de tráfico y las nueve cámaras que se distribuyen en estos momentos por toda la ciudad, entre otros medidores.
Caos circulatorio
El embrollo circulatorio se ha agudizado en la capital alavesa en los últimos tiempos, desde que el pasado mes de agosto se pusieron en marcha las obras de los viales de la zona norte, considerada como la reforma viaria más importante acometida en la historia de Vitoria. Desde entonces, los problemas de tráfico no han cesado en la ciudad.
La oposición ha hablado de caos circulatorio y falta de previsión, y los ciudadanos han tenido que soportar inusuales atascos, especialmente en los accesos a los polígonos industriales situados en la periferia. También la creación de carriles especiales para la circulación de autobuses y taxis en el centro han ocasionado problemas a los vecinos y conductores, que ven cómo tienen que hacer frente a nuevos problemas cuando en realidad se pretendía dar solución a los que ya existían.