Expediente para expulsar al padre exculpado de maltratar a su bebé
El hombre ha sido despedido del trabajo al haber trascendido su detención
La policía ha iniciado un procedimiento administrativo para expulsar de España a un hombre de nacionalidad ecuatoriana detenido la pasada semana por los Mossos d'Esquadra junto con su esposa, acusados de maltratar a un bebé de 20 meses. Un informe del forense negó los malos tratos y aseguró que sólo existía desnutrición. El hombre se encontraba en situación irregular y ha sido despedido del trabajo al trascender la noticia.
Un portavoz de la Subdelegación del Gobierno de Barcelona explicó ayer que no consta la apertura de ningún expediente de expulsión contra ese hombre, aunque podría s...
La policía ha iniciado un procedimiento administrativo para expulsar de España a un hombre de nacionalidad ecuatoriana detenido la pasada semana por los Mossos d'Esquadra junto con su esposa, acusados de maltratar a un bebé de 20 meses. Un informe del forense negó los malos tratos y aseguró que sólo existía desnutrición. El hombre se encontraba en situación irregular y ha sido despedido del trabajo al trascender la noticia.
Un portavoz de la Subdelegación del Gobierno de Barcelona explicó ayer que no consta la apertura de ningún expediente de expulsión contra ese hombre, aunque podría ser que la policía haya iniciado los trámites y todavía no haya presentado la solicitud de expulsión. En cualquier caso, las mismas fuentes explicaron que ese proceso dura 40 días y que el afectado puede realizar alegaciones. Además, sigue pesando contra él y su esposa un proceso penal que paralizaría la expulsión, si se aprobase.
Inicialmente, los padres eran acusados de maltratar al niño y de mantenerlo atado en su domicilio familiar del Raval. Los Mossos d'Esquadra presentaron un informe forense que hablaba de malos tratos, avalado por el Hospital del Mar. Cuando los padres pasaron a disposición judicial el fiscal pidió la prisión para ellos, pero el magistrado Eduardo Navarro, titular del Juzgado de Instrucción número 32 de Barcelona, lo rechazó a la vista de las fotografías aportadas y reclamó el reconocimiento del niño.
Otro forense determinó después que el pequeño únicamente sufría desnutrición y que no hubo malos tratos, por lo que la acusación inicial quedó descartada, si bien los padres podrían ser acusados de abandono de familia por falta de cuidado y de nutrición adecuados. Al parecer, la familia atravesaba por problemas económicos y dejaban al niño al cuidado de una vecina. Hasta un mes antes el pequeño iba a una guardería. Su hermano de cuatro años acudía con normalidad al colegio.
El mismo día de la detención, ese menor y su hermano de cuatro años, fueron dados en custodia a la Generalitat y ayer, tras la resolución judicial, un portavoz de la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia admitió a la agencia Efe que los menores podrían volver con sus padres.
El fiscal jefe de Cataluña entonó ayer el mea culpa y admitió que posiblemente hubo "cierta precipitación" de todas las partes, pero matizó que en aquel momento todo parecía indicar que se trataba de un caso de malos tratos.