Mujeres realizadoras reivindican su labor tras la cámara en un mundo todavía "fundamentalmente masculino"

"Cada vez hay más mujeres realizadoras, pero el mundo de la dirección cinematográfica es todavía fundamentalmente masculino". Así lo afirma la guionista y directora Lourdes Iglesias (San Sebastián, 1960), quien, por esa razón, y con el objetivo de "impulsar" el trabajo de las féminas tras la cámara, ve necesarios ciclos como el que dedica esta semana la Casa de Cultura Lugaritz de San Sebastián al cine realizado por mujeres.

El ciclo -en el que ya se ha podido ver Carol, no te dispares, el cortometraje con el que Iglesias se estrenó en la dirección hace dos años y que muestra los...

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"Cada vez hay más mujeres realizadoras, pero el mundo de la dirección cinematográfica es todavía fundamentalmente masculino". Así lo afirma la guionista y directora Lourdes Iglesias (San Sebastián, 1960), quien, por esa razón, y con el objetivo de "impulsar" el trabajo de las féminas tras la cámara, ve necesarios ciclos como el que dedica esta semana la Casa de Cultura Lugaritz de San Sebastián al cine realizado por mujeres.

El ciclo -en el que ya se ha podido ver Carol, no te dispares, el cortometraje con el que Iglesias se estrenó en la dirección hace dos años y que muestra los indefinidos límites entre la normalidad y la locura- concluirá esta tarde con la proyección de dos documentales: Warrior Marks, un trabajo en el que la británica Pratibha Parmar aborda la mutilación sexual femenina, y La venda, en el que la chilena Gloria Camiragua recoge los testimonios de varias mujeres sobre la dictadura de Pinochet.

¿Es distinto el cine realizado por hombres y el que dirigen las mujeres? La guionista y realizadora donostiarra no cree que existan diferencias básicas en el producto final por el hecho de que lo elabore un hombre o una mujer, pero sí admite que pueden registrarse miradas o sensibilidades distintas ante un mismo tema, dado que las vivencias son diferentes. "En mis guiones o en mi corto, por ejemplo, las protagonistas son chicas, pero porque me caen más cerca, porque entiendo mejor el universo femenino", comenta.

La también realizadora donostiarra Ione Hernández participa igualmente en el ciclo de Lugaritz, donde se ha proyectado su corto Aizea, ciudad del viento, un relato sobre el amor y la fe rodado en Estados Unidos. La joven subraya su satisfacción por tomar parte en esta cita con el cine realizado por féminas y reivindica su papel detrás de la cámara, porque todavía son "muy pocas las mujeres directoras".

Hernández considera que, a la hora de elegir los asuntos, las mujeres realizadoras se centran más en los sentimientos, mientras que entre los hombres predominan los trabajos cinematográficos de aventuras o de acción.

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