Sierra de las Nieves
Carta al Delegado Provincial de Medio Ambiente de Málaga: los hechos ocurridos en el Parque Natural de la Sierra de Las Nieves (Málaga) el sábado 12 y el domingo 13 de enero demuestran que la solución al gravísimo problema de la falta de control de las visitas en el Parque y en los accesos al mismo no puede de ninguna manera esperar.
El problema se repite cada vez que una importante nevada coincide con un fin de semana soleado: el desplazamiento de vehículos desde la Costa del Sol, Málaga capital Sevilla y Cádiz es numeroso. La última vez que ocurrió algo semejante fue en la nevada de 1...
Carta al Delegado Provincial de Medio Ambiente de Málaga: los hechos ocurridos en el Parque Natural de la Sierra de Las Nieves (Málaga) el sábado 12 y el domingo 13 de enero demuestran que la solución al gravísimo problema de la falta de control de las visitas en el Parque y en los accesos al mismo no puede de ninguna manera esperar.
El problema se repite cada vez que una importante nevada coincide con un fin de semana soleado: el desplazamiento de vehículos desde la Costa del Sol, Málaga capital Sevilla y Cádiz es numeroso. La última vez que ocurrió algo semejante fue en la nevada de 1998 y tampoco entonces usted actuó aunque se le dio a conocer el problema.
El dia 12, sólo por el acceso al Parque desde la carretera de Ronda a San Pedro de Alcántara, llegaron más de 2.000 vehículos. Este número se quedó pequeño para los que llegaron el domingo.
La gente se movía por los alrededores desde donde había podido llegar con el coche, pisoteando, arrojando restos de basuras, buscando nieve, deslizándose por las laderas con plásticos y un largo etcétera de barbaridades medioambientales.
Llama la atención cómo usted justifica por criterios de protección el cierre del Área de Acampada de Quejigales y sin embargo permite que miles de visitantes incontrolados campen a sus anchas en áreas de la máxima protección del Parque Natural como el Pinsapar y la Meseta de Quejigales.
Como asociación senderista, nos corresponde denunciar y proponer soluciones, la más fácil sería permitir a un número determinado de vehículos el acceso a la zona alta del Parque, el resto que se quede en Conejeras, al comienzo del carril, y las personas que quieran subir que lo hagan andando.
A usted le corresponde velar por la protección de la Naturaleza y por la seguridad de los visitantes. Como es usted incapaz de adoptar soluciones no tenemos más remedio que exigir su dimisión por lo absolutamente ineficaz de su gestión.