La juez inspecciona en Carcaixent el huerto donde dos perros mataron a un hombre que había saltado el muro

La juez de Alzira que instruye el caso inspeccionó el huerto de cítricos y conoció a los perros rottweiler Tysson y Batiste que en la madrugada del pasado 3 de octubre atacaron a Juan José Plaza en Carcaixent tras saltar el muro que rodea la parcela y le causaron la muerte.

La inspección ocular del lugar de los hechos la realizó la titular del juzgado número 1 de Alzira en unos 50 minutos, prácticamente la mitad del tiempo que los peligrosos animales emplearon para destrozar el cuerpo del joven de 20 años que antes de morir tuvo que soportar la amputación de las dos pierna...

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La juez de Alzira que instruye el caso inspeccionó el huerto de cítricos y conoció a los perros rottweiler Tysson y Batiste que en la madrugada del pasado 3 de octubre atacaron a Juan José Plaza en Carcaixent tras saltar el muro que rodea la parcela y le causaron la muerte.

La inspección ocular del lugar de los hechos la realizó la titular del juzgado número 1 de Alzira en unos 50 minutos, prácticamente la mitad del tiempo que los peligrosos animales emplearon para destrozar el cuerpo del joven de 20 años que antes de morir tuvo que soportar la amputación de las dos piernas y del brazo derecho en el hospital de la Ribera. La juez Pilar Jiménez de Parga estuvo acompañada en el minucioso recorrido por el propietario de la finca y de uno de los perros, J. A. G. A., por la fiscal del caso, el guardia civil que liberó a Juan José de las fauces de los canes y el letrado de la acusación particular. Un policía judicial llevó a cabo un extenso reportaje fotográfico tanto del interior del huerto como de sus alrededores. La comitiva inspeccionó incluso el lugar de la pared por donde se presume que accedió la víctima con su cuñado, en torno a la una de la madrugada, para recoger unas placas de mármol robadas y previamente escondidas que procedían de unas viviendas en construcción próximas al lugar de los hechos.

La impresión que causan los dos perros, encerrados ayer en una jaula, fue resumida por el abogado de la familia de Plaza, Daniel Rodrigo: "Me he quedado alucinado al ver lo grandes y fuertes que son". Un veterinario determinará, a requerimiento judicial, la raza de los perros, su peligrosidad y si fueron entrenados para atacar. La inspección ocular y las declaraciones del cuñado de la víctima que logró escapar harán innecesaria la reconstrucción de los hechos por el peligro que entrañan los animales. Sus dos propietarios están citados a declarar mañana. La primera citación judicial la eludieron al "no estar psicológicamente preparados".

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