La decisión del PSOE de disolver su agrupación de Manilva provoca la baja del 30% de la militancia

Dos años después de que Emilio López Berenguer y otra transfuga socialista se aliaran con los cinco concejales elegidos en las listas del Grupo Independiente Liberal (GIL) para arrebatar la alcaldía a Izquierda Unida, el PSOE se dispone a disolver su agrupación en Manilva (Málaga). La influencia de López Berenguer sobre la agrupación local del PSOE ha llevado a este colectivo a una ruptura con el comité provincial.

Alrededor del 30 % de los militantes socialistas de Manilva han solicitado su baja en el partido por desacuerdo con la ejecutiva provincial, a la que acusan de mantener una '...

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Dos años después de que Emilio López Berenguer y otra transfuga socialista se aliaran con los cinco concejales elegidos en las listas del Grupo Independiente Liberal (GIL) para arrebatar la alcaldía a Izquierda Unida, el PSOE se dispone a disolver su agrupación en Manilva (Málaga). La influencia de López Berenguer sobre la agrupación local del PSOE ha llevado a este colectivo a una ruptura con el comité provincial.

Alrededor del 30 % de los militantes socialistas de Manilva han solicitado su baja en el partido por desacuerdo con la ejecutiva provincial, a la que acusan de mantener una 'actitud antidemocrática'. El PSOE de Málaga, que achaca las dimisiones al anuncio de expulsión del alcalde manilveño, Emilio López Berenguer, ha pedido a la ejecutiva federal la delegación de competencias para proceder a la disolución de la agrupación local del municipio. 'La ejecutiva lleva tratando el problema de Manilva desde hace años', dijo ayer la secretaria de Organización del PSOE de Málaga, Rosa Torres. La responsable provincial se refirió a la apertura de un expediente a López Berenguer por promover, el 9 de noviembre de 2000, una moción de censura junto a otra edil de su partido y cinco ex concejales del GIL contra la entonces alcaldesa, Antonia Muñoz, de Izquierda Unida. López y su compañera, María Lozano, desoyeron las advertencias del comité provincial socialista de expulsarles si rompían el acuerdo suscrito entre PSOE e IU, por lo que fueron suspendidos de militancia durante 18 meses.

En junio de este año, una vez cumplida la sanción, el PSOE de Málaga se negó a readmitir a López Berenguer en las filas del partido si no presentaba su dimisión como regidor y restituía en el cargo a Antonia Muñoz, a lo que éste se negó. Sin embargo, el alcalde manilveño recibió el apoyo del comité local, que criticó lo que consideró como 'una campaña de descrédito' promovida por el provincial contra el primer edil, al que aseguran 'se ha sancionado dos veces por la misma falta'.

'Cuando hemos planteado la expulsión de López Berenguer hay militantes han tomado la decisión de presentar su baja, algo que es legítimo', señaló Torres. Una vez que el comité Federal de luz verde, la Ejecutiva provincial creará una gestora para proceder a la constitución de una nueva asamblea local.

La decisión planteada ya hace una semana por el secretario de Política Municipal del PSOE de Málaga, Luis Reina, no ha gustado a la agrupación local, que acusa al dirigente provincial de 'mantener una actitud caciquil y de desprecio a las bases'. Desde el pasado lunes ha pedido la baja el 30 % de los 65 militantes socialistas de Manilva. López Berenguer, que solicitó en octubre 'su baja voluntaria' del PSOE, ya ha anunciado su intención de concurrir a las próximas elecciones municipales por un partido independiente.

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