Un juzgado falla a favor de los empleados de Opening en Málaga
Un juzgado malagueño ha dado la razón a 49 trabajadores de Opening en Málaga, ha declarado extinguida su relación laboral con la academia y ha condenado a la empresa a abonar indemnizaciones que suman más de 180.000 euros. En el juicio celebrado el 30 de octubre, los empleados esgrimieron los retrasos y el impago de salarios para solicitar la extinción de sus contratos. El Juzgado de lo Social número 7 ha estimado su demanda al entender que el incumplimiento 'continuado y persistente' es 'justa causa' para extinguir la relación laboral. La plantilla comenzó a cobrar con retraso en diciembre pa...
Un juzgado malagueño ha dado la razón a 49 trabajadores de Opening en Málaga, ha declarado extinguida su relación laboral con la academia y ha condenado a la empresa a abonar indemnizaciones que suman más de 180.000 euros. En el juicio celebrado el 30 de octubre, los empleados esgrimieron los retrasos y el impago de salarios para solicitar la extinción de sus contratos. El Juzgado de lo Social número 7 ha estimado su demanda al entender que el incumplimiento 'continuado y persistente' es 'justa causa' para extinguir la relación laboral. La plantilla comenzó a cobrar con retraso en diciembre pasado, situación que se agravó a partir de junio, cuando los trabajadores dejaron de percibir sus salarios.
El fallo se sustenta en una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Galicia para desechar los argumentos de la empresa que intentó justificar los incumplimientos en su crisis económica: 'Si tal situación concurre impidiéndole cumplir con su obligación de pago puntual de salarios, la norma estatutaria le posibilita el acudir a las formas de modificación de las condiciones de trabajo pero no puede obtener por su propia autoridad y contra la voluntad de los trabajadores afectados una quita o aplazamiento en el pago de sus obligaciones salariales'. Además, remite a otra sentencia del Tribunal Supremo para apuntar que una situación económica adversa 'no es aducible para no abonar puntualmente los salarios'. El letrado de los empleados, Salvador Jiménez Oliver, estimó que la sentencia 'debe ser la primera' con carácter colectivo desde que en agosto la empresa dejara en la calle a 900 trabajadores.
La resolución tampoco atiende el argumento de Opening de que la demanda era 'abusiva' porque había otros empleados afectados por el impago que no acudieron a la justicia: 'La atonía de otros trabajadores, también perjudicados por dicho impago, no puede impedirles el ejercicio de sus acciones individuales; conclusión distinta supondría dejar condicionado dicho ejercicio a la actitud que adoptaran aquellos'.