Atacado de nuevo en Andoain el coche de una testigo protegida

Una testigo protegida cuya declaración sirvió para detener y condenar a un implicado en un acto de violencia callejera en Andoain (Guipúzcoa) ha sufrido la quema de su automóvil, por segunda vez en dos años. El último ataque ocurrió el sábado cuando desconocidos arrojaron varias botellas incendiarias contra el turismo.

La víctima es la persona que identificó a Carlos García Preciado, condenado por la Audiencia Nacional a 16 años de prisión por la quema de un cajero en Andoain. El PSE-EE de este municipio, en donde el coche de un concejal del PNV fue objeto el pasado miércoles de otro sa...

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Una testigo protegida cuya declaración sirvió para detener y condenar a un implicado en un acto de violencia callejera en Andoain (Guipúzcoa) ha sufrido la quema de su automóvil, por segunda vez en dos años. El último ataque ocurrió el sábado cuando desconocidos arrojaron varias botellas incendiarias contra el turismo.

La víctima es la persona que identificó a Carlos García Preciado, condenado por la Audiencia Nacional a 16 años de prisión por la quema de un cajero en Andoain. El PSE-EE de este municipio, en donde el coche de un concejal del PNV fue objeto el pasado miércoles de otro sabotaje, denunció ayer la aparición de pintadas con los nombres de dos concejales socialistas y el del magistrado Baltasar Garzón.

Según publicó ayer el diario El Mundo, la mujer objeto de las agresiones, que tiene fijada su residencia habitual en otra localidad guipuzcoana, había acudido esa misma noche a dormir en la vivienda familiar de Andoain. Poco después, su coche fue atacado.

En la madrugada del 30 de diciembre de 2000, otro vehículo de su propiedad ardió tras ser atacado también con artefactos incendiarios. A la mañana siguiente, las calles de Andoain amanecieron con pasquines y carteles amenazantes contra la propietaria del coche.

El testimonio de esta mujer ante la Ertzaintza sirvió para identificar en 1997 a García Preciado como uno de los autores de la quema de un cajero automático de una entidad de crédito. En el juicio, celebrado en diciembre de 2000, la testigo reclamó no comparecer por miedo, ya que desde lo sucedido había sido amenazada en varias ocasiones. La incomparecencia de la testigo motivó la suspensión de la vista en dos ocasiones, por lo que finalmente tuvo que acudir. Pese a que se retractó, el tribunal no otorgó validez a este último testimonio y condenó a García Preciado. El encausado se dio a la fuga para no ingresar en prisión.

Los actos de violencia callejera han descendido un 64,48% en octubre pasado, frente al mes anterior, al pasar de 37 a 13 altercados, según datos del Ministerio del Interior suministrados a Europa Press. El mes con menos sabotajes fue junio, con 12.

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