Entrevista:ENRIQUE SALVO TIERRA | Delegado de Obras Públicas de la Junta en Málaga

"El suelo representa el 80% del precio de la vivienda"

'En urbanismo hay dos tipos de gestores; los que ven la ciudad como la obra de arte del hombre y los que la ven como el monopoly', proclama Enrique Salvo. Obviamente, él se sitúa entre los primeros, y su talante afable no ha impedido que actúe con contundencia contra los excesos urbanísticos de la Costa del Sol.

Pregunta. Han amenazado al Ayuntamiento de Málaga con retirarle las competencias urbanísticas. ¿Llegarían a hacerlo?

Respuesta. Cuando hemos hecho esa advertencia es porque estamos dispuestos a cumplirla. En el primer semestre de 2002 se ha generado una diná...

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'En urbanismo hay dos tipos de gestores; los que ven la ciudad como la obra de arte del hombre y los que la ven como el monopoly', proclama Enrique Salvo. Obviamente, él se sitúa entre los primeros, y su talante afable no ha impedido que actúe con contundencia contra los excesos urbanísticos de la Costa del Sol.

Pregunta. Han amenazado al Ayuntamiento de Málaga con retirarle las competencias urbanísticas. ¿Llegarían a hacerlo?

Respuesta. Cuando hemos hecho esa advertencia es porque estamos dispuestos a cumplirla. En el primer semestre de 2002 se ha generado una dinámica de aplicaciones de instrumentos urbanísticos que no preservan el interés general sobre el particular, y recalificaciones de suelo de protección oficial a renta libre que no se ajustan a las reglas del juego. Málaga es de las capitales españolas donde más viviendas se construyen, pero donde hay menor porcentaje viviendas de de protección oficial (VPO) o promoción pública.

'El nivel de ocupación de las viviendas del litoral oscila entre el 50% y el 60%, no más'
'Hay 15 proyectos de ciudades geriátricas, que pueden duplicarse para el final de año'

P. Pero la futura Ley del Suelo otorga a los municipios las competencias que piensan retirar.

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R. Es cierto, pero no podemos hacer dejación del marco legal vigente. La nueva ley contempla que algunas competencias de la Junta queden a expensas de los ayuntamientos. Sin embargo seguirá competiendo a la administración autonómica el control de calidad en materia urbanística.

P. ¿Cómo se ejercerá?

R. Tendremos que ir a la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) para que dirima las discrepancias que puedan producirse.

P. Pero la justicia es lenta.

R. Parece que la Sala de lo Contencioso pretende ponerse al día en muchas de las sentencias que administrativamente nos interesan, como son las de Marbella, donde unas 150 licencias están impugnadas ante el TSJA, y otro centenar en Fiscalía, cuando se ha ocupado suelo para equipamiento o zonas verdes.

P. ¿Tienen impugnado algún proyecto en Málaga capital?

R. Tenemos una impugnación de una licencia para la construcción de un geriátrico en el Puerto de la Torre, que más allá de un pequeño establecimiento para atención a mayores, llevaba una fuerte promoción de viviendas de planta baja más dos que no son precisamente las requeridas por nuestros mayores.

P. Ahora todos quieren construir ciudades geriátricas.

R. Sí. En estos momentos tenemos 15 proyectos en la Costa del Sol, con una previsión de que se dupliquen antes de final de año. Existe una demanda muy fuerte fundamentalmente de personas del norte de Europa. La demanda viene condicionada por la estabilidad del mercado euro y por las garantías que da la Costa del Sol en infraestructuras y servicios. Pero estamos pidiendo unos requisitos básicos: que no estén aisladas de los núcleos urbanos y que no constituyan un falso camino para generar conjuntos residenciales encubiertos.

P. Antes lamentaba la falta de viviendas baratas en Málaga. ¿Qué ocurre en la Costa del Sol?

R. Lo mismo. La inestabilidad de la bolsa ha provocado un movimiento del capital a valores como los bienes inmuebles. Esto ha disparado el precio del suelo hasta el punto de que en muchos municipios representa el 80% del precio real de la vivienda, es decir, que se está pagando 40 millones de pesetas por una vivienda de 100 metros cuadrados y resulta que 32 millones se están pagando por el suelo. Eso lleva a que los ayuntamientos no tengan interés reservar suelo para VPO, porque lo ponen en el mercado y le sacan mucho más. Para hacer caja rápida se están poniendo muchos suelos en carga a precios bastante más elevados que los que tienen, de modo que el sector público no puede entrar en la construcción de esas viviendas, y eso provoca que la población joven de los municipos litorales tenga que emigrar en unas condiciones absolutamente precarias.

P. ¿Se conoce la ocupación real de las viviendas que se construyen en el litoral?

R. El nivel de ocupación oscile entre el 50 y el 60%, no más, porque la vivienda se tiene como un bien patrimonial inmovilizado en espera de que en la espiral especulativa alcance un mayor valor. Esto ocurre en la primera línea de costa. En segunda línea se está asentando más el turismo residencial, que demanda una calidad ambiental y de vida importante. Es gente dispuesta a pagar 400 o 500 millones de pesetas por tener buenos servicios y viviendas de 400 metros cuadrados construidos y al menos una hectárea de extensión.

P. Pero antes se refería a la huida de la población joven al interior, y obviamente esas promociones no son para jóvenes.

R. El éxodo de población joven es notable en Málaga capital, sobre todo en los barrios con peor calidad ambiental. Los jóvenes no quieren seguir allí, pero en Málaga el precio de un piso oscila entre 30 y 40 millones de pesetas, y ellos tienen un contrato basura de 90.000 o 100.000 al mes. Eso les obliga a salir al área metropolitana, que en los últimos cinco años ha registrado un crecimiento casi exponencial. Rincón de la Victoria, Alhaurín y Torremolinos han duplicado su población. Para estos municipios es difícil incluso abastecer de agua a toda la población. Y no es siempre que las administraciones lleguen tarde, sino que se tienen que proveer de instrumentos que permitan prever cuáles van a ser las necesidades.

P. Los planes urbanísticos se quedan pequeños muy deprisa.

R. Efectivamente, y en casi todos los municipios costeros se está haciendo un uso fraudulento de las modificaciones puntuales de elementos, que están para pequeñas alteraciones, hasta llevarlas a grandes recalificaciones de suelo. Málaga capital tiene un gran número de modificaciones, y Estepona nos preocupa mucho porque ya hay unas 70, muchas de gran calado. Nosotros les decimos que en vez de eso hagan una revisión del PGOU. Nadie quiere hacer una revisión del PGOU a mitad de legislatura, pero nosotros tenemos que garantizar la legalidad.

P. Los municipios de la segunda línea de costa que no tienen capacidad para diseñar sus propios planes llevan mucho tiempo reclamando sus normas subsidiarias para poder crecer.

R. La aprobación de normas subsidiarias se ha dinamizado mucho en la cornisa. Después de casi cinco años han salido adelante las de Ojén, que es emblemático porque es el municipio de la Costa del Sol donde más suelo protegido había y el ayuntamiento planteó un crecimiento más grande del que se ha aprobado. Hay una dinámica importante en la Costa del Sol Oriental; en la Axarquía, donde hemos querido acelerar esas normas porque las construcciones han proliferado anárquicamente y hay una demanda de servicios e infraestructuras que evidentemente no aparecen en ningún documento de planificación. Por eso ha sido el primer territorio donde hemos encargado un plan subregional, para que ordene el suelo no urbanizable y evite construcciones en suelo rústico.

P. ¿Cómo y cuándo se desarrollará el corredor ferroviario de la Costa del Sol?

R. El trazado litoral se ve obstaculizado por la compactación urbanística de algunas zonas, así que apostamos por una fórmula mixta que utilizará las zonas litorales menos densificadas y el interior. Esto permitirá que cualquier punto de la Costa del Sol quede a no más de una hora de los grandes equipamientos. Una zona de alta densificación es el área metropolitana de Málaga y los municipios de Benalmádena, Fuengirola y Torremolinos. Ahí además es donde se producen los mayores flujos de movilidad; unos siete millones de pasajeros en transporte público, lo que supone sólo un 20% del total de desplazamientos. Estamos hablando de 140 millones de viajes al año en el área de esos cuatro municipios. En Mijas y Marbellaaún hay posibilidades de que el tren vaya por el litoral y enlace con Estepona. La parte oriental no presenta complicaciones, salvo la llegada desde Málaga a Rincón y la travesía de Rincón. En cuanto a los tiempos, es prematuro hablar de eso, pero nos planteamos hacerlo en esta década.

"Los excesos de Marbella no tienen parangón"

P. El alcalde de Marbella quiere aprobar su PGOU y pide a la Junta que sea tolerante.

R. En Marbella no ha habido un cambio de conducta urbanística. Nos acercamos a cifras de infracciones que superan las del mismo periodo del año anterior. ¿Cómo a estas alturas no vamos a considerar que han ocupado zonas verdes o suelos destinados a equipamientos escolares y sanitarios? ¿Cómo vamos a obviar esto? No se puede cubrir con un tupido velo lo que ha ocurrido. Otra cosa es que siempre hemos dicho que lo mejor que puede ocurrirle a Marbella es tener unas reglas claras del juego frente al urbanismo, porque se ha generado una incertidumbre que ha beneficiado a los negocios inmobiliarios de menor rigor.

P. Pero Marbella no puede estar eternamente sin PGOU. ¿Cuál es la solución?

R. Por una parte, ir contando con sentencias del TSJA sobre las licencias impugnadas, que aclarará lo que ha venido ocurriendo en estos siete últimos años. Y por otra, la presentación de esa revisión del plan de acuerdo con las directrices que se marcaron desde la Comisión Provincial de Urbanismo. A partir de ese momento se originará un escenario de tranquilidad en Marbella. En cualquier caso, quedan momentos duros que la gente de allí no se merece.

P. ¿Momentos duros?

R. Se deben producir. Dependerá del cariz que tengan esas sentencias, pero en algunos casos donde hay licencias sobre sistemas generales de zonas verdes y equipamientos, restaurar la legalidad vigente no va a ser precisamente fácil.

P. ¿Los excesos de Marbella pueden estar dejando en la sombra los que se cometen en otros municipios costeros?

R. Los excesos urbanísticos de Marbella no son comparables con los del resto de la Costa del Sol. No tienen parangón. En cualquiera de los restantes municipios, y en algunos casos no se han renovado las competencias urbanísticas, hay cuando menos diálogo, y casi siempre se alcanzan puntos de consenso importantes. En Marbella, ni hay reglas del juego ni consenso ni diálogo ni voluntad por parte del ayuntamiento. En el resto ocurre que se pretende dar una respuesta inmediata ante una demanda tan fuerte, y la inmediatez no es el mejor amigo en la toma de decisiones, pero no es igual.

P. Benalmádena ha sido después de Marbella el municipio donde más infracciones ha detectado la policía urbanística, bien es verdad que a mucha distancia.

R. En Benalmádena estamos ahora metidos con la revisión del PGOU, y hemos mantenido hasta cuatro reuniones con el alcalde, Enrique Bolín, y con los equipos técnicos del ayuntamiento. Hay cinco puntos de discrepancia bastante importantes, por ejemplo sobre la ampliación del puerto deportivo, pero también hay puntos de consenso.

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