Invitación al baile

La Vieja Trova Santiaguera, los veteranos del Buenavista Social Club, Antonio Machín y ahora la que faltaba, la Orquesta Van Van: no se puede negar que, también cinematográficamente, la música cubana está de moda. Aunque los Van Van no son, contra lo que pareciera, unos recién llegados: llevan 30 años haciendo mover el esqueleto a tres generaciones de isleños, hasta convertirse en los 'cronistas populares' de la vida, en expresión de Pablo Milanés, entrevistado por la cámara del cubano Vega y la argentina Mazure.

Que los Van Van son más que un grupo musical lo deja entrever tanto la fur...

La Vieja Trova Santiaguera, los veteranos del Buenavista Social Club, Antonio Machín y ahora la que faltaba, la Orquesta Van Van: no se puede negar que, también cinematográficamente, la música cubana está de moda. Aunque los Van Van no son, contra lo que pareciera, unos recién llegados: llevan 30 años haciendo mover el esqueleto a tres generaciones de isleños, hasta convertirse en los 'cronistas populares' de la vida, en expresión de Pablo Milanés, entrevistado por la cámara del cubano Vega y la argentina Mazure.

Que los Van Van son más que un grupo musical lo deja entrever tanto la furibunda reacción en su contra del exilio de Miami que registra el documental, como la aparición, junto al excelente Juan Formell, compositor y creador del grupo, del mismísimo ministro de Cultura cubano. Y sólo entrever: la película se excede en el registro de recitales en vivo y pasa de puntillas por otros aspectos menos llamativos del grupo. El resultado sabe a poco: por precariedad de medios y por falta de profundidad en las entrevistas, pero termina por constituir un pálido retrato de artistas inspirados, una película más para oír que para ver...