Huelga indefinida desde esta noche en la recogida de basura de Málaga
Los intentos de mediación de la Junta de Andalucía para evitar la huelga indefinida en la empresa de limpieza de Málaga cayeron en saco roto. La reunión que a media mañana de ayer mantuvieron los representantes de Limasa y de los sindicatos en el Sercla acabó sin avenencia. En consecuencia, sigue en pie la huelga indefinida que comenzará esta noche a las 23.00 horas.
El detonante del conflicto ha sido la negociación del convenio colectivo, que comenzó en febrero pero que no ha avanzado ni un ápice. El escollo principal es la reivindicación de los trabajadores de descansar dos días a la ...
Los intentos de mediación de la Junta de Andalucía para evitar la huelga indefinida en la empresa de limpieza de Málaga cayeron en saco roto. La reunión que a media mañana de ayer mantuvieron los representantes de Limasa y de los sindicatos en el Sercla acabó sin avenencia. En consecuencia, sigue en pie la huelga indefinida que comenzará esta noche a las 23.00 horas.
El detonante del conflicto ha sido la negociación del convenio colectivo, que comenzó en febrero pero que no ha avanzado ni un ápice. El escollo principal es la reivindicación de los trabajadores de descansar dos días a la semana. En la actualidad, la jornada de esta empresa mixta -el 51% del capital es privado y el 49%, municipal- es de 35 horas repartidas en seis días.
Tras concluir sin acuerdo la reunión, Miguel Ángel del Puerto, representante de CCOO, apuntó: 'Agotada la negociación no nos queda más remedio que la huelga. Aunque esta medida siempre se puede parar'. El alcalde, Francisco de la Torre, por su parte, instó a ambas partes a negociar. El primer edil hizo esta petición porque 'aunque se pongan servicios mínimos, van a estar muy por debajo de lo que la ciudad necesita'. Por eso insistió en que empresa y sindicatos debían evitar el conflicto 'y para eso nada mejor que el marco del diálogo'.
Los representantes de los trabajadores replicaron al alcalde que no podía 'mantenerse al margen' del conflicto y que tenía que 'armarse de autoridad' y exigir a Limasa que se sentara a negociar.