Tribuna:

Para un cambio de izquierdas

¿Cuáles son hoy los desafíos de la sociedad catalana? ¿Qué hacer para realizar el cambio profundo y real que el país requiere? ¿Qué políticas son las más adecuadas para resolver los problemas cotidianos de las personas que viven en Cataluña? Estas son las preguntas que intentaremos responder en la VII Asamblea Nacional que Iniciativa per Catalunya-Verds (IC-V) celebra este fin de semana.

Cataluña tiene pendientes grandes retos para aprovechar las posibilidades del desarrollo tecnológico del mundo globalizado de hoy y evitar sus enormes riesgos: un modelo de desarrollo con futuro, ecológ...

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¿Cuáles son hoy los desafíos de la sociedad catalana? ¿Qué hacer para realizar el cambio profundo y real que el país requiere? ¿Qué políticas son las más adecuadas para resolver los problemas cotidianos de las personas que viven en Cataluña? Estas son las preguntas que intentaremos responder en la VII Asamblea Nacional que Iniciativa per Catalunya-Verds (IC-V) celebra este fin de semana.

Cataluña tiene pendientes grandes retos para aprovechar las posibilidades del desarrollo tecnológico del mundo globalizado de hoy y evitar sus enormes riesgos: un modelo de desarrollo con futuro, ecológicamente sostenible, con pleno empleo y de calidad, sin exclusión social; un Gobierno con capacidad para resolver con eficacia los problemas cotidianos de las personas, la falta de redes públicas de asistencia a la infancia y a la gente mayor o para dar una salida a las situaciones de dependencia. En definitiva, una democracia de calidad que permita la participación directa de los ciudadanos y una mayor transparencia en la vida política. Sólo la izquierda, en toda su pluralidad, puede impulsar una nueva gran fase de reformas que permita afrontar estos retos. Retos que suponen un cambio profundo en relación con la política seguida hasta ahora por Convergència i Unió (CiU) y el PP.

Sólo la izquierda, en toda su pluralidad, puede impulsar una nueva gran fase de reformas

IC-V va a definir en esta Asamblea su propio camino para conseguir un cambio político de izquierdas en Cataluña. Un itinerario que consiste básicamente en participar, actuar, ganar y gobernar.

- Participar. Nos hemos propuesto un objetivo ambicioso: iniciar, a partir de la Asamblea, un proceso de debate con el conjunto de la sociedad, especialmente con aquellos sectores con los que compartimos valores y aspiraciones, para decidir colectivamente los compromisos de gobierno de IC-V.

Se trata de cambiar el esquema clásico de relación de los partidos con la sociedad, en el que los expertos elaboran el programa-producto y lo ofrecen-venden al electorado. IC-V pretende recorrer el camino inverso, elaborar el programa y los compromisos concretos que queremos aportar a un gobierno plural de izquierdas, a través del debate y de la experiencia cotidiana de las personas. Queremos, en definitiva, que el primer pacto sea con la sociedad.

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- Actuar. Durante los próximos meses nos van a tener a su lado, como hasta ahora, la Plataforma en Defensa del Ebro, que lucha contra el Plan Hidrológico Nacional; los estudiantes y profesores que se oponen a la regresión educativa que plantea el Gobierno del PP, el movimiento que propone una globalización alternativa, las asociaciones de inmigrantes que reclaman el fin de la Ley de Extranjería, los ayuntamientos que piden soterrar las líneas eléctricas de alta tensión, los sindicatos europeos que el 14 de marzo se manifestarán en Barcelona por una Europa social, las asociaciones de mujeres que reivindican el fin de la violencia doméstica o las trabajadoras y trabajadores de Lear que defienden sus puestos de trabajo. IC-V va a estar con estas movilizaciones, que representan sectores sociales imprescindibles para construir cualquier propuesta de gobierno alternativa.

- Ganar. En las próximas elecciones al Parlament de Catalunya no habrá mayorías absolutas. Para ganar, para conseguir una nueva mayoría de izquierdas, será imprescindible movilizar el amplio y diverso abanico que conforma el electorado progresista. Y sumar, después de las elecciones, los escaños del Partit dels Socialistes (PSC), Esquerra Republicana (ERC) e IC-V. Cada fuerza tendrá que movilizar su electorado actual y potencial. IC-V tiene, en este sentido, una importante responsabilidad, la de aglutinar y sumara los centenares de miles de ciudadanos y ciudadanas que se identifican con la izquierda transformadora y que en su mayoría se abstuvieron en las pasadas elecciones.

Para que el cambio sea real, y no sólo un cambio de personas, será necesario un reequilibrio electoral a favor de IC-V. Sin duda, una mayor presencia parlamentaria de IC-V es la mejor garantía para evitar una mayoría de gobierno en la que CiU esté presente, dado que tanto ERC como el PSC no han descartado esta posibilidad.

- Gobernar. Tenemos una dilatada y positiva experiencia municipal de gobierno. IC-V cree que el reto de una futura mayoría plural de izquierdas es impulsar un proyecto común de construcción del país que tenga como eje la mejora de las condiciones de vida de las personas, desarrollando todas las potencialidades del autogobierno e incrementando sus ahora insuficientes competencias y recursos.

Queremos gobernar para transformar la sociedad a partir de cuatro objetivos: redistribuir la riqueza y el trabajo, tanto productivo como doméstico; tratar de modo ecológico la economía y la sociedad, introduciendo los criterios de sostenibilidad en todas las políticas; fomentar la igualdad en la sociedad y la política, asumiendo hombres y mujeres todos los trabajos y responsabilidades, tanto en el ámbito público como en el privado, y establecer el Estado federal con el pleno reconocimiento de la realidad plurinacional, la superación del techo autonómico y la participación directa de Cataluña en la construcción europea.

El Foro Social Mundial, celebrado en Porto Alegre, en el que he tenido la oportunidad de participar, plantea el predominio de la política, de los derechos ciudadanos, por encima de los grandes intereses económicos. Este es el mismo espíritu que anima a IC-V: dar nuevo sentido a la política y a la izquierda, por una Cataluña mejor que la actual, necesaria y posible.

Joan Saura es presidente de ICV y diputado en el Congreso

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