Mosqueteros del pincel
Abrir el estudio al público y organizar exposiciones de otros es algo normal en Nueva York, París o Berlín desde hace tiempo, pero este grupo salido de la facultad sevillana va más lejos y ha pensado crear la figura del artista residente. 'Nosotros le ofrecemos una habitación aquí durante el tiempo que necesita para trabajar en una exposición que, más tarde, mostraremos', adelanta Nacho G. del Río. 'La verdad es que, de momento, no hemos montado todo esto para enseñar nuestro trabajo, sino el de otros. Es una forma de seguir aprendiendo', añade.
El piso que comparten los jóvenes artista...
Abrir el estudio al público y organizar exposiciones de otros es algo normal en Nueva York, París o Berlín desde hace tiempo, pero este grupo salido de la facultad sevillana va más lejos y ha pensado crear la figura del artista residente. 'Nosotros le ofrecemos una habitación aquí durante el tiempo que necesita para trabajar en una exposición que, más tarde, mostraremos', adelanta Nacho G. del Río. 'La verdad es que, de momento, no hemos montado todo esto para enseñar nuestro trabajo, sino el de otros. Es una forma de seguir aprendiendo', añade.
El piso que comparten los jóvenes artistas dedica las tres mejores y más espaciosas habitaciones para las exposiciones temporales. El estudio colectivo está al final del piso y es una amplia habitación en la que conviven mesas, caballetes, libros y cientos de ideas apuntadas en los lugares más insospechados. Junto a las imágenes sobre la dualidad de Rosa Vives (Sevilla, 1978), pueden verse el boceto en el que Ramón David Morales analiza la muerte de la pintura o los graffittis con los que José Alberto Medina marca todas sus pinturas. Los artistas asegura que están dispuestos a seguir arañando el dinero del alquiler de donde puedan porque además de aprender de otros, 'nos estamos pasando bien'.
'Nos hemos propuesto organizar unas seis exposiciones por temporada y ya están todas las fechas cubiertas. Incluso hay gente que tendrá que esperar para la próxima', comenta Rosa Vives .
Además de los cuatro artistas citados, Natalia Gómez (Ciudad Real, 1976), José Galiano (Sevilla, 1976), María José Gallardo (Badajoz, 1976) y Carmen Granados (Málaga, 1976) forman también parte de este proyecto en el que todo se hace por amor al arte. Sala de eStar abrirá, el próximo 10 de enero, su segunda exposición: Tránsitos, de David López Panea.