El Rey destaca la lucha internacional contra quienes apoyan el terrorismo

La sociedad española tiene ante sí un reciente desafío, como es la inmigración, para el que el Rey Juan Carlos, en su discurso navideño, pide a la sociedad española -poderes públicos y ciudadanos- que lo afronte con los valores de justicia, respeto y afecto. El Rey tuvo presente en su alocución el atentado terrorista en Estados Unidos del 11 de septiembre, a partir del cual el mundo tiene un 'entendimiento más cabal' del peligro terrorista. En España continúa el terrorismo, recordó el Monarca para advertir a ETA de que la sociedad vasca impedirá que se asiente su 'totalitarismo excluyente'....

La sociedad española tiene ante sí un reciente desafío, como es la inmigración, para el que el Rey Juan Carlos, en su discurso navideño, pide a la sociedad española -poderes públicos y ciudadanos- que lo afronte con los valores de justicia, respeto y afecto. El Rey tuvo presente en su alocución el atentado terrorista en Estados Unidos del 11 de septiembre, a partir del cual el mundo tiene un 'entendimiento más cabal' del peligro terrorista. En España continúa el terrorismo, recordó el Monarca para advertir a ETA de que la sociedad vasca impedirá que se asiente su 'totalitarismo excluyente'.

'Somos un pueblo que sabe lo penoso que resulta el rechazo social y la discriminación laboral'

'Hay que combatir a quienes practican, apoyan o encubren el terrorismo'

La inmigración estuvo muy presente en el discurso navideño del Rey, cargado de referencias a valores democráticos, toda vez que sus diferentes vertientes han formado parte de la vida política, social y económica de España en este año. La breve mención que don Juan Carlos realizó el pasado año a la inmigración se ha transformado ahora en peticiones concretas de cómo afrontar 'el desafío'. El Rey insta a que cualquier actuación esté presidida por 'valores'. y sin perder de vista que España fue, no hace tanto tiempo, un pueblo con una fuerte inmigración.

'Somos un pueblo que sabe apreciar el inmenso valor de ser acogido con justicia, respeto y afecto, y que sabe también lo penoso que resulta unir al dolor de la separación de la familia y de la patria el rechazo social o la discriminación laboral', recordó el Rey.

Los poderes públicos tienen sus deberes y sus obligaciones respecto a la inmigración, pero no sólo a ellos corresponde afrontar este 'desafío'. 'También debemos asumirlos cada uno de nosotros, incluidos los inmigrantes, así como facilitar las medidas necesarias para resolver los problemas y potenciar los beneficios que entraña la inmigración', pidió don Juan Carlos.

El Rey habló de la inmigración inmediatamente después de haber expuesto su opinión sobre la 'senda' por la que debe transitar la sociedad española. 'La que enaltece los valores universales de defensa y promoción de los derechos fundamentales de la persona; la que procura el bien común desde la convicción de que el bienestar individual debe ir unido al bienestar colectivo; la que fomenta el respeto y el aprecio por los otros y por sus ideas, aunque sean distintas de las nuestras; la que considera la paz indisolublemente unida a la libertad y a la justicia; la que lamenta como propio el sufrimiento ajeno y trabaja generosamente para aliviarlo'.

El terrorismo en España fue parte del núcleo fundamental del discurso real del pasado año toda vez que sólo un mes antes se había producido la firma entre el PP y el PSOE, con la rúbrica del Gobierno, del Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo. En aquel momento pidió al resto de las fuerzas políticas que se unieran contra la violencia. 'En España el terrorismo ha seguido estérilmente sembrando de sangre nuestra geografía y llenando de sufrimiento a muchas familias', dice el Rey en su discurso de este año. Su primer mensaje en este apartado ha sido precisamente para las víctimas. 'Quiero decir a las víctimas del terrorismo y a sus familias que siempre tendrán, junto a nuestro recuerdo emocionado, nuestro afecto y el de toda la sociedad española, deudora de su sacrificio'. A continuación se dirigió a ETA.

'Sepan los terroristas que la sociedad vasca, con el total apoyo del resto de la sociedad española, nunca permitirá que su libertad y sus instituciones democráticas sean sustituidas por el totalitarismo excluyente y reaccionario de unos fanáticos asesinos', advirtió.

También aludió al zarpazo del terrorismo que ha sacudido este año 'la conciencia de la humanidad' con 'los espantosos atentados terroristas del 11 de septiembre en Estados Unidos, que ha abierto 'una nueva etapa en la historia del mundo'. 'Ese atentado ha trastocado muchos de los presupuestos sobre los que basábamos el modo de vida de nuestras sociedades y el modelo de relaciones internacionales vigente'. 'La reacción de la comunidad internacional ha mostrado de manera clamorosa su decisión de impedir que, en el futuro, puedan ejercer su tiranía quienes creen que la violencia y el terror son instrumentos válidos para imponer sus ideas y para ahogar la libertad de quienes no las comparten'.

Estos hechos hacen pensar al Rey que propiciarán 'un entendimiento más cabal del peligro que el terrorismo entraña para la civilización y sus valores'.

Esta catástrofe tendrá consecuencias en la adopción de medidas conjuntas de los países democráticos.

'Se fortalecerán, en consecuencia, los mecanismos de cooperación internacional para combatir a quienes practican el terrorismo, lo apoyan o lo encubren y para aislar a quienes lo justifican o lo defienden'. El Rey recordó que en esta materia la Unión Europa 'ha dado en los últimos meses pasos concretos'.

El Rey agradeció las muestras de afecto que ha recibido a lo largo del año en los numerosos actos por toda España de conmemoración del 25 aniversario de su reinado. 'A todos deseo agradeceros vuestro aliento y vuestro respaldo que tanto me anima a seguir prestando con ilusión mi servicio a España. Mi familia y yo os damos las gracias'.

El mensaje navideño del Rey,transmitido por radio y televisión la noche del 24, fue grabado el día 20, dos días antes de que fuera hospitalizado el duque de Lugo, Jaime de Marichalar, esposo de la hija mayor de don Juan Carlos, la infanta Elena.