Entrevista:GABRIELLA DE ESTEBAN | Directora de orquesta

"Dirigir una orquesta es jugar con masas sonoras y crear"

La directora de orquesta Gabriella de Esteban se muestra orgullosa de su extenso currículum. Tras pasar por Francia, Italia y Gran Bretaña, ha recalado en Viena, al casarse con un profesor de música austriaco. Allí, trabaja en la Ópera de Viena y está especializada en dirigir espectáculos multimedia, que mezclan orquesta y coros con solistas, actores y bailarines y películas o vídeos proyectados en un gran escenario circular. De Esteban nació en Barakaldo pero vivió siempre en Bilbao, hija de padre abogado y madre profesora, ambos amantes de la música. A los siete años empezó sus estudios en e...

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La directora de orquesta Gabriella de Esteban se muestra orgullosa de su extenso currículum. Tras pasar por Francia, Italia y Gran Bretaña, ha recalado en Viena, al casarse con un profesor de música austriaco. Allí, trabaja en la Ópera de Viena y está especializada en dirigir espectáculos multimedia, que mezclan orquesta y coros con solistas, actores y bailarines y películas o vídeos proyectados en un gran escenario circular. De Esteban nació en Barakaldo pero vivió siempre en Bilbao, hija de padre abogado y madre profesora, ambos amantes de la música. A los siete años empezó sus estudios en el Conservatorio de Bilbao, donde 'lo pasaba pipa' y desde entonces no ha dejado de aprender.

Pregunta. Siempre se ha dicho que el aprendizaje musical es muy duro.

Respuesta. Eso es culpa de las películas. No es así. Estás en el colegio y luego haces una actividad extraescolar que puede ser judo, inglés o piano, como yo. Lo sacrificado es cuando quieres hacerlo de manera profesional.

P. ¿Cuándo supo que quería dedicarse a dirigir orquestas?

R. Cuando tenía 14 años, viendo a un director de orquesta, que no recuerdo quién era, pensé: ésto es lo que yo quiero hacer. Antes quise ser solista de órgano, pero para llegar a ser realmente buena tienes que echarle muchas horas. Eso sí, cuando fui a París y ví a Riccardo Muti dirigiendo a Prokofiev fue cuando decidí comenzar los estudios para dirigir.

P. ¿Qué le impresionó de Muti?

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R. Cómo dominaba la masa sonora. La dirección no es estar delante de unos músicos y dar gritos. Mucha gente piensa que un director es como un dictador, pero nada más lejos de la realidad. Para mí es sencillamente jugar con masas sonoras, crear.

P. Pero hacen falta grandes gestos.

R. Depende del tamaño de la orquesta. Los gestos varían si se trata de seis personas músicos o una gran orquesta. Yo no dirijo con la misma gestualidad a una formación pequeña de música contemporánea que una ópera.

P. Usted está especializada en dirigir espectáculos multimedia.

R. Me sitúo en el centro de un escenario circular, donde se colocan los instrumentistas con los solistas a los lados; por delante y detrás los bailarines y actores; dos narradores a cada lado del escenario, y, al mismo tiempo, mediante un intercomunicador en la oreja me mantengo en contacto con los técnicos de sonido, los de vídeo y los de luz. No sólo me ocupo de dirigir a la orquesta, sino de todo lo demás. El espectáculo incluye proyección de vídeo, baile y música y todo ello debo dirigirlo yo y le doy la entrada a un violín y también a un vídeo.

P. Todo eso es muy moderno.

R. Para mí no. Es el pan de cada día. Somos pocos los que lo hacemos porque se necesita una visión de conjunto muy rápida.

P. ¿Nunca se acaba de aprender?

R. No, sobre todo cuando sales fuera y ves tanto, lo mejor que hay, y tienes la oportunidad de que te enseñen.

P. ¿Ha notado mucha diferencia entre España y el resto de Europa?

R. Por favor...

P. ¿Y cómo puede solucionarse?

R. Todo sale de la formación. Si se imparte una alta formación, se tienen buenos profesionales. Es tan sencillo como eso.

P. ¿Cuántas mujeres son directoras de orquesta?

R. Muy pocas. No se les dan oportunidades.

P. Pero hay muchas mujeres instrumentistas. No parece un mundo sexista.

R. Las orquestas no lo son, pero el poder de decisión no lo tienen los miembros de las orquestas. Las mujeres tenemos menos oportunidades. Los hombres se apoyan entre ellos.

P. ¿No le da rabia tener que trabajar en el extranjero?

R. Muchísima, porque soy bilbaína. Ya me gustaría a mí poder trabajar aquí. Yo me fui para seguir aprendiendo. Y he llegado a un nivel en el que estoy dirigiendo a las mejores orquestas en Centroeuropa. Allí donde todo el mundo sueña con ir, hay una bilbaína dirigiendo.

P. Para el público vasco es usted una desconocida.

R. Totalmente. Y eso me duele, porque soy de aquí. Sin embargo, en Europa sí conocen mi nombre y mi carrera.

P. Viena es un lugar de refenrencia en música clásica.

R. Lo es. Tienen un respeto por la música y unos conocimientos, que no hay en ninguna parte del mundo. Y cuidan y potencian a los artistas.

P. Qué música le arrastra más.

R. El programa en el que trabajo en este momento.

P. Se enfrenta a la música de manera muy profesional.

R. No, es todo pasional. Por ejemplo, si mañana he de dirigir el concierto en memoria de Antxon Larrauri, pues hasta mañana yo estoy enamorada de Larrauri. Y después el siguiente proyecto y yo lo daré todo.

Gabriella de Esteban, en las escaleras de la Biblioteca Bidebarrieta de Bilbao.SANTOS CIRILO

PERFIL

Gabriella de Esteban (Barakaldo) ha sido profeta fuera de su tierra. Renombrada directora de orquesta en Centroeuropa, reclamada para proyectos innovadores, especialista en dirigir espectáculos multimedia, le gustaría que la reclamaran más a menudo de su lugar de nacimiento.

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